Capítulo 15 Y cuál es su nombre

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Este sería el último capítulo muchas gracias por pasar a leerlo y agradezco de antemano sus comentarios.



Capitulo único.

Estaba en una camilla abriendo los ojos de manera lenta, como si me hubiera atropellado un camión de 5 toneladas, estaba oscuro y se colaba la luz por debajo de la puerta, las ventanas estaban abiertas por lo cual solamente la luz de la luna alumbraba el lugar, mis ojos se acostumbraron rápido y al voltear a ver mi panza ya no estaba, eso significaba que mi bebé ya estaba a salvo en un cunero, trate de estirarme para buscar el interruptor que llama a la enfermera, pero los puntos de mi cesárea habían hecho que me arrepintiera de quererme mover.

Me quede quieto un momento más, ya que aún me dolía el último movimiento audaz que había querido hacer, cuando por fin recupere el aire que me había robado el dolor busque el botón de la enfermera y con cuidado lo alcance para que vinieran, de inmediato entraron 2 enfermeras y empezaron a revisar mis signos vitales en las consolas, vieron mi herida y empezaron a aplicar un poco de lidocaína en gel para evitar que se sintiera incomodo en la parte de afuera, igual no menguaba el dolor que sentía en la parte interna, pero agradecía el gesto humanitario.

- Te ves horrible – May estaba entrando con un mini cunero de cristal donde se veía una bolita bien envuelta en sábanas blancas, no lo voy a negar mi corazón se aceleró como a mil revoluciones por microsegundo, jamás pensé que me iba a emocionar tanto conocer a una persona.

- Me imagino que sí, olvidé traer el maquillaje – hice una pequeña broma mientras estiraba los brazos para que me pasaran a mi bebé, a pesar de que dolía mucho el gesto no podía evitar quererlo tener de inmediato.

- Si sigues haciendo mucho esfuerzo vas a abrir la herida y no te va a gustar eso – deje de estirarme y May me paso a mi bebé, cerré los ojos como si fuera un obsequio que debía de abrir y cuando lo tuve totalmente en mis brazos abrí los ojos para encontrarme a la criatura más hermosa sobre la faz de la tierra.

- ¡Genial! Se parece completamente a mí – fue lo primero que me salió de la boca, ya que tenía miedo de que se pareciera a Ganzaburo, estoy seguro que en sus años mozos era atractivo, pero no quería verlo de nuevo en esta vida.

- Estoy segura que de no ser así no te hubiera molestado – sé que a pesar de todo hubiera amado a mi bebé, pero no quitaba el hecho de que agradeciera mucho que se pareciera más a mí.

- Lo voy a amar como lo más preciado en mi vida, pero le da un plus ese cabello güerito – May se quedó conmigo un buen rato mientras me enseñaba a darle de comer, como cambiarlo, cargarlo de la manera adecuada y también asegurándose de que mi herida estuviera bien, solamente se separó de mí porque habían llegado mis papás a ver a su nuevo nieto.

- Mira nada más eso, ¡ES IDENTICÓ A TI! – mi mamá fue la primera en empezar a hacer alboroto por ver la mancha blanca en el poco cabello de mi bebé, literalmente me lo arrebato de los brazos y empezó a llenarlo de besos y caricias suaves, mi papá junto a ella tenía cara de espanto, al parecer pensaba que mi mamá iba a matar a mi hijo, casi de inmediato entraron Seto y Mokuba a la habitación y Mokuba al igual que mi madre, hizo un enorme escándalo por conocer a su hermanito.

- ¿Cómo te sientes? – Seto no se acercó mucho al escándalo y llegó directo hacía mi cama, tenía la leve sensación de que se sentía incómodo por mi bebé, después de todo era hijo legítimo de Ganzaburo, no solo podía quitarle todo su imperio, sino que también era hijo de su enemigo jurado.

- Cómo si me hubiera atropellado un camión, pero fuera de eso muy bien – acarició mi cabeza y sonrió al verme sano y salvo, supongo que lo había puesto nervioso el hecho de que no despertara de inmediato después de la cirugía.

Mi apellido es Kaiba (Yaoi) 18+Donde viven las historias. Descúbrelo ahora