Mi dueño?

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Jamás me habían dado un masaje tan sensual y erótico como el que ahora me está ofreciendo Brett.

Sus manos suaves y masculinas recorren magistralmente todo mi cuerpo desnudo y anhelante.

"Eres perfecta Linda..."

"Perfecta..."

Cierro los ojos disfrutando de las atenciones que las manos de Brett me prodigan mientras que mi pecho sube y baja, debido a la excitante que es toda la situación.

"Y en este momento y para siempre eres solo mía."

Sus manos amasan mis perfectos senos duros haciendo que mi cuerpo reaccione.

"Tan deliciosa..."

La boca de Brett chupa lentamente cada uno de mis pezones con suavidad.

Mi amigo me coge de una manera ruda, dura, desesperada.

Todas y cada una de las veces pasadas que me ha penetrado han sido de esa forma.

Pero ahora puedo ver al diferencia con Brett, quien al parecer, me está haciendo el amor.

Sus manos me sostienen por la espalda.

Mi cuerpo se arquea mientras que mi boca gime placenteramente.

"Brett..."

Mis manos acarician su fuerte torso con un poco de rudeza.

Lo necesito.

Me he vuelto una adicta al sexo y a que me complazcan.

"Dime que quieres Linda."

"Te complaceré en todo lo que me pidas..."

Las palabras de Brett calientan mi sangre, por lo que entre jadeos y gemidos susurro.

"Quiero que me hagas estallar, Brett."

"Quiero que me hagas tener el mejor orgasmo que nunca haya tenido antes."

Brett se desliza hacia mis pliegues sensibles y rosados.

Cuando su lengua hace el primer contacto con mi humedad, sus manos rodean mis senos apretándolos.

"aaahhh...Brett..."

"Brett..."

Me contorsiono contra El pues, a pesar de que tiene poco que cogí de forma brutal con amigo, lo que me hace Brett es delicioso, suave, ardiente.

Su lengua sigue dándome un mar de sensaciones deliciosas.

"mmmmhhhhhh..."

Brett deja escapar esos ruiditos masculinos que me excitan y erizan mi piel.

Me doy cuenta de que esta es la primera vez que estoy haciendo el amor.

Y es la primera vez que mi amigo no se encuentra presente.

Mis manos se vuelven locas acariciando el cabello de Brett.

Lo insto a seguir dándome más placer mientras que cierra los ojos y frunce un poco el ceño.

Verlo de esa forma es tan sensual!

Echo la cabeza hacia atras perdida en este placer caliente, cuando lo siento.

"Oh dios, Brett..."

"Brett....!"

El orgasmo me golpea fuertemente.

Siento mis entrañas pulsar y palpitar dentro de mi.

Brett no me da tregua e inmediatamente se coloca sobre mi para penetrarme.

LindaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora