The art of love - Jikook -

♡; f i v e

22 de octubre de 1996, Seúl, Corea del Sur.

Se me hizo tarde, desperté cinco minutos antes de las ocho de la mañana, me vesti con el primer conjunto de ropa que encontré en el closet.

- Ya está listo el desayuno hi... - dijo mi madre -

- ¡No, ya me voy, es tarde! - tomé una pieza de pan -

- Pero ni siquiera..

- ¡Adiós! - grité saliendo de mi hogar, tenía que llegar, por lo menos un minuto antes que Jimin -

¿Cómo iba a correr tantos metros en pocos minutos? No lo sé, pero puedo hacerlo.

Mis piernas son bastante frágiles, no es que correr tantos metros sea una actividad rutinaria, a penas voy saliendo de mi vecindario y siento que están temblando y todo se lo debo a aquel despertador que no hizo ruido.

¡Te odio despertador!

[ · · · ]

Me faltaban un par de calles para llegar a la institución, sentía que ya no podía más y aún mi camino se extendía, ir hacia el teatro aumentaba la cantidad de metros que tenía que correr, al cruzar la calle, respire profundo y continúe corriendo, espero que Jimin no lleve mucho tiempo esperando por mí.

Mientras corría alguien me detuvo, tomó mi muñeca, me asuste, creí que algún extraño quisiera hacerme algo.

- ¿A dónde vas con tanta prisa? - cuando me giré a mirarlo, empuje inmediatamente a Kang Ma Ru -

- ¿¡Qué te pasa!? ¡Me asustaste! - grité -

- ¡Hey! Cálmate, sólo aproveche que te vi.

- Sólo no te golpeó porque... - bufé - Ya me voy.

- Te acompaño - sonrió -

- No, gracias - me di la vuelta y comencé a correr -

Iba soltando tantos insultos como me supiera, de verdad me asuste peor de lo que se pueden imaginar, sentía como mis manos temblaban y mi corazón latía rápidamente, ya no solo por los rápidos pasos que daba sino como resultado de aquel susto.

Llegué al teatro y entré, mire mi reloj, aquel marcaba las ocho con veinticinco minutos, deje mis cosas sobre una de las butacas y caminé hacia el escenario, no lo veía por ninguna parte, lo único que me faltaba era que ya no estuviera aquí, me senté en la orilla de la plataforma, para esperar por lo menos cinco minutos más, si es que, aún no llegaba.

- ¿Se habra ido? - suspiré -

- ¡Ah, tonta puerta! - alguien intentaba abrir, forcejeando la cerradura, cuando por fin lo logró, entro, era Jimin, mi corazón volvió a su ritmo normal, recién llega, puedo estar más tranquilo ahora, cuando cerró la puerta, su vista indirectamente se posó en mí - ¿Jungkook?

- Hasta que llegas, te dije que vendría - sonreí -

- Lo sé, ¿llevas mucho tiempo esperando? - lentamente se acercaba a mí -

- Bueno, llegué hace unos segundos, creí que ya no estabas aquí, me desperté tarde hoy - reí ligeramente -

- Oh, también desperté tarde, de hecho venía corriendo - sonrió -