♡; n i n e t e e n

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22 de noviembre de 1996, Seúl, Corea del Sur

Pov. Jimin.

Han pasado cuatro días, hoy es la obra y me siento muy nervioso en comparación a la última vez en que invité a Jungkook a mi presentación.

Hoy se siente diferente, quiero, deseo y anhelo mostrarle lo mejor de mí y que al finalizar el espectáculo pueda correr a abrazarlo y agradecerle que haya venido.

El teatro es un caos, todos van de un lado a otro y yo, intento arreglar mi vestuario para antes de que sea la tercera y última llamada. Este es mi examen final para poder salir de vacaciones antes, si lo apruebo con diez o nueve, no tendré que venir hasta el inicio del semestre nuevo, aunque eso conlleva mucho tiempo sin verlo, no pensé decir esto pero, espero que mi calificación sea ocho.

Voy a hacerlo, puedo hacerlo bien.

¡Chicos es hora!

Te dedicaré esta obra, Jeon Jungkook.

[ . . . ]

Los familiares y amigos de los alumnos llenaban el teatro, incluso los padres del menor estaban ahí, Jimin los había invitado y reservado un lugar junto a sus padres.

Ambas familias se llevaron bien al instante, era de sorprenderse puesto que los señores Park no acostumbraban a socializar con las personas, tal parece que los señores Jeon les agradaron al primer segundo en que cruzaron una palabra.

— Miren, mi hijo se acerca —dijo la madre de Jimin.

— Buen día, espero que disfruten mucho la obra, Jungkook ayudó con la escenografía —señaló al recién mencionado, mismo que sonrió con timidez.

— Mi hijo va a ser el mejor de todos —el padre de Jimin, el señor Jihyun soltó una risa lasciva.

— No lo pongo en duda Señor Park.

— Así es, Jungkook nos ha contado que Jimin es un gran bailarín y además muy carismático —sonrió.

— Mi esposa tiene razón, hoy veremos al mejor amigo de nuestro hijo, hacer lo que más le apasiona —dijo el señor Jeon con una ligera sonrisa en la comisura de sus labios.

Jungkook lo miró cabizbajo, su padre jamás había aludido que él hiciera lo que más amaba y eso era filmar todo aquello que le pareciera hermoso y perfecto para el ojo humano. La madre de Jimin notó tal expresión, pensó en decir las palabras más pertinentes que pudieran alegrar al menor y sobre todo hacer que su padre se interesará en el maravilloso e inteligente hijo que tiene.

— Jungkook también es muy bueno, le ayudaré a editar su proyecto, el cual consiste en una película que ha filmado durante bastante tiempo, deberían ver su trabajo —la señora Park dijo sonriente.

— Lo sé, Jungkook, mi querido hijo dedica su tiempo para filmar las cosas más bellas que existen en este mundo, me alegra tanto que disfrute de la profesión que ha elegido, tal vez en un futuro vea una película dirigida por Jeon Jungkook —aquellas palabras provenientes de la madre del estudiante fueron de gran apoyo para éste, pues a partir de este momento sabía que al menos aquella mujer se sentía feliz y orgullosa de su hijo.

— ¿Qué hay de usted Señor Jeon? ¿Qué piensa de la profesión a la que su hijo se dedicará?

— Padre, por favor no haga tales preguntas —Jimin susurro.

The art of love - Jikook -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora