♡; f o u r t e e n

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*12 de noviembre de 1996, Seúl, Corea del Sur*

Pov. Jungkook

Y sólo transcurrieron dos días.

Él me dijo que iría con ella para organizar el escenario del teatro.

Él se veía tan feliz y entusiasmado.

Él me rompió el corazón..

Yo dejé que se marchará.

Aquel dolor tan punzante que lastima a mi corazón me sofoca, estoy deshecho, las lágrimas no dejan de caer. La escena de ese beso fue justo mi talón de Aquiles, ví como le robaba el beso y él inconscientemente lo recibió, en lo más profundo de mi ser esperaba que se apartará, pero nunca sucedió.

Sigo sin comprender por qué quema tanto, si yo mismo lo deje ir. Si fui yo quien lo tiró al mismo vacío al que él me tiró a mí.

¿¡Por qué!?

¿¡Por qué volví a desear con la última pizca de anhelo que me mirarás a mí!?

¿¡Por qué ella me miraba de esa forma!?

Una tan repugnante, llena de orgullo y victoria que no había necesidad de utilizar las palabras porque con eso basto para saber que me gritaba en la cara que es suyo.

— Deja de verlos —un susurro me hizo reaccionar.

— No puedo —respondí, ni siquiera tenía idea de a quien le hablaba.

— ¿No puedes o no quieres?

— No tengo idea —no tengo ni la más mínima y jodida idea.

Las cosas se complicaron todavía más, no había tiempo para siquiera explicar lo que sucedió hace exactamente una hora, el rubio no soltaba a Jungkook a pesar de que éste golpeaba su pecho mientras decía entre sollozos: "Déjame".

Aquellos golpes que el menor le daba, las lágrimas que eran parte de la escena junto al dolor tan inmenso que originó el silencio sumando aquel segundo beso que Jungkook presenció fue lo suficientemente desgarrador que ante el más mínimo intento de huir, falló por completo, Jimin lo detuvo con la intención de explicarle lo acontecido, por más que el menor se hiciera el fuerte no pudo soportarlo y frente al —ya no— dueño de su corazón se desmoronó.

La chica, protagonista maliciosa de este escenario, sonreía ampliamente porque consiguió revelar lo que Jungkook era verdaderamente, con un poco de ayuda de Kang Ma Ru, el imbécil que Jimin tanto odiaba.

— ¡Maldita sea, ya! —golpeaba todavía más fuerte— ¿No lo entiendes? Si no vas a decir algo entonces déjame ir de una vez.

Por más veces que lo intentó, ninguna le daba buenos resultados, Jungkook sentía que su cuerpo se quemaba en una llama interminable, los brazos de Jimin parecían una prisión tan inmensamente aterradora de la cual no podía escapar.

— Basta... basta, por favor... —sollozaba con fuerza— Ya no te quiero volver a ver, aléjate de mí porque lo único que haces es lastimarme al igual que Ma Ru, debí suponerlo, son iguales —de nuevo sus pequeños puños se estaban impactando contra el pecho del rubio— Fue mi error, mi jodido error por pensar que alguien como tú sentiría lo que yo, soy tan ingenuo ¡y estúpido!

Jimin seguía en silencio, escuchando todo lo que Jungkook dejaba salir debido al inmenso dolor que sentía.

Si hacemos un recuento, todo ocurrió así...

[ . . . ]

Jungkook, momentos antes...

Salía de la universidad, me sentía muy contento pues mi proyecto tuvo una gran calificación y no podía esperar a contarle a Jimin. Cuando llegue a la entrada —la salida para mí— ahí estaba él, de espaldas, su silueta es perfecta no me canso de admirarlo, deseaba sorprenderlo pero, en menos de un parpadeo el sorprendido fui yo, sí, yo.

Rachelle la chica con la que Jimin trabajaba para su presentación se abalanzó sobre él y...se...se besaron.

¿Entonces me mintió?

¿No eran solamente amigos?

Le habían lanzado a mi corazón la flecha más grande, mi felicidad se fue al carajo, la presión en mi pecho se estaba volviendo cada vez más sofocante y un par de sollozos salieron de mis labios, las lágrimas no se hicieron esperar y empaparon mis carrillos de inmediato, ya no era la primera sino la segunda vez que miraba una escena así, todo por mi tan estúpida mala suerte.

Intenté huir pero su voz —joder como la odio ahora— me detuvo, no quería detenerme, sólo necesitaba irme corriendo y tratar de olvidar todo lo que estaba pasando.

— Jungkook...

Por favor...no me llames.

— Jungkook, esto no es lo que parece, ella...

— A mí no tienes porque explicarme nada Park Jimin —no le dirigí la mirada— Yo, ya me iba.

— N-No, escucha, yo quiero explicarte —decía alterado.

— ¡Pero yo no quiero escuchar! —grité, más destrozado no podía sentirme, pero en algo tenía razón, no tengo motivos para escucharlo— Yo necesito irme.

— Espera por favor.

Me tomó de las manos, por más que lo intenté no logré zafarme y mi llanto estaba empeorando.

— Quítame la manos de encima.

— No, hasta que decidas escucharme.

— Ya te dije que no —sollocé.

— Lo harás —jaló de mis manos y me llevó hasta su pecho, sus brazos me rodearon y lo único que pude hacer fue comenzar a golpearlo, él no está entendiendo que me duele tanto, es insoportable— ¡Déjame!

Jimin reforzaba su agarre pero no me decía nada, sólo podía escuchar sus sollozos y unas cuantas gotas caían sobre mi cuello.

Es así como volvemos al principio de este momento, dos muchachos envueltos en la tristeza y el silencio, con una joven que se enorgullece por sus acciones sin darse cuenta del daño que ha causado.

— ¿Y tú qué miras? —habló Jimin.

— Veo lo patéticos que son, Kang Ma Ru tenía razón sobre ti Jungkook —rió con malicia.

— ¿Qué? —el mencionado la miró con confusión.

— Así es, Kang Ma Ru me pidió que le hiciera un favor a Jimin y bueno, lo cumplí —sonrió.

— ¡Eres una...! —gritó Jungkook.

— Jungkook no —el rubio lo detuvo— Vete de aquí Rachelle.

— Lo haré —sonrió y se dió la vuelta.

— ¿Por qué? —musitó— Yo no le hice nada, tan mal estuve para que...

— No, no es tu culpa Jungkook —Jimin apegó al menor más hacia él.

Jimin ya no podía soportar más esto, antes de decir algo más escucho un ligero hilo de voz a su alrededor.

— Despierta —un murmullo bastó, se giró hacia el lugar de donde provenía la voz pero no divisó a nadie, ¿qué está pasando?










































¿qué está pasando?

h e l l o <3

The art of love - Jikook -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora