☢️🍁𝗗𝗲 𝗩𝘂𝗲𝗹𝘁𝗮 𝗔 𝗟𝗮 𝗚𝘂𝗲𝗿𝗿𝗮🍁☢️

40. Bonitos ojos.

Capítulo largo, pero vale la pena el final.

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.•𝐄𝐧 𝐄𝐥 𝐏𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨•.
Septiembre 1916

─Muchas gracias por la ropa que me das, de verdad no sabría como agradecerte─ dice Alemania a su nuevo amigo con mascara de gas toxico, el cual en los últimos meses le ha hecho una compañía agradable y le ayudaba a tranquilizarse en sus ataques de pánico cada vez que escuchaba el estallido de las bombas.

─No hay de que agradecer, me agradas muchacho y tu aura es tranquila y no eufórica como los recién llegados─ responde el otro tipo, el cual, no se quitaba la mascara a menos de que sea necesario y nunca le mostro su rostro al muchacho que se llevaba bien.

Y no es que no confiara en el, sin embargo, cuando se quitaba la mascara lo trata con miedo y el no quiere que lo trate como los demás. No quiere que sepa quien es en verdad.

La situación era tranquila, el ejercito germano aun cavaban en tierra francesa para sus trincheras y ganas mas territorio del enemigo, ahora estaban en una intriga porque en los días anteriores los británicos bombardearon en los bordes de las trincheras, a los altos mandos tenían un mal presentimiento y por eso prepararon a la primera división (a la cual el pertenecía) a preparar los cañones en caso de un ataque.

─¿Sabes? Estoy preocupado de estas bombas, no solo porque a veces me paralizo, sino que de repente se detuvieron y los vigías aun no mandan respuestas.

─No te preocupes muchacho, todo va a estar-

Un estallido cae cerca de ellos y ambos caen al suelo por la fuerza, Alemania es levantado por su nuevo amigo y corren lo mas que puedan a uno de los refugios, sin embargo, las cosas se ponen peor cuando avisan de un ataque de gas toxico y la llegada de tanques. Alemania entra en shock y solo quería irse mas la insistencia de los altos mandos, y la amenaza de muerte por no participar, le impedían realizar su plan de huida.

─Maldición, ¿Por qué no lo pensé antes?─ murmura el amigo de Alemania, el cual se colocaba con desesperación la mascara anti-gas para no morir tan joven ─Esta claro que es una trampa.

─¿Una trampa?

─Si, una trampa. Los franceses no atacaron a al azar, bombardearon primero la tierra para eliminar muchas de las trampas que habíamos dejado y después enviaron la artillería pesada para exterminarnos como ratas─ recalca el contrario con suma molestia consigo mismo por no haberse dado cuenta de esa posibilidad. Se suponía que fue al frente para apoyas a su gente, es lo que un country debía de hacer ─Ve a avisarle al general, yo avisare a los otros que prendan la retirada. ¡Ve rápido niño!

Alemania capta la orden y busca con desesperación entre los estallidos de las armas y los cañones al general para avisar que era una trampa, una trampa que le costaría la vida a miles y miles de soldados de ambos lados.

─¡Señor, me tiene que escuchar!─ grita el alemán mas es tomado del brazo del tipo que lo había aventado a una trinchera desde el inicio.