- Decide, ¡¿De quién estás enamorado?!,¿Él o yo?
En el fondo, ni el mismo sabia la respuesta.
- No lo se... ¡Los amo a los dos!
Un triangulo amoroso que conecta todas las puntas.
¿Quién dice que tienes que elegir solamente a uno?
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Habían llegado al enorme edificio viejo de departamentos donde los dos chicos vivían. El menor supo que era el momento de despedirse de los mayores, posiblemente no los vería hasta las próximas 2 semanas de recuperación, si es que aun tenia el trabajo de pasante.
Pero las cosas nunca salen como uno piensa, fuera para mal o para bien. Mark se mantendría atado a esos dos hombres.
- Creo que es hora de ir a casa...- el pelirrojo fue cortado antes de terminar con su despedida.
- Ni lo pienses. De seguro guardas una llave de repuesto, dime donde esta para poder ir por tus cosas.- Jack se quitaba el cinturón de seguridad.
- No entiendo...- en verdad Mark se sentía confundido.
- Mira niño, ustedes dos viven en un puto noveno piso y ni siquiera hay elevador, ¿como piensas subir?. Te recuerdo que el doctor recomendó reposo por una semana.
- ¿Jack?
- No me mires así Darry, que tu también vendrás con nosotros. Una parte de esto es tu culpa, así que ustedes dos vendrán a mi casa por dos semanas.- la voz del moreno era contundente.
- ¿y yo por que?, mi único pecado es haber caído en la tentación.
- Cállate Darrell.- su piel oscura disimulaba lo sonrojado que se encontraba.- estamos los tres juntos en esto. Así que vas a ayudarme a cuidar al pasante, se lo debemos después de tantos traumas.
Darrell solamente susurro un par de maldiciones y se recostó contra el asiento, ese parecía ser un "si" de su parte, mientras el pelirrojo aun estaba con la mente en blanco después de haber escuchado aquello.
- Ahora dime donde guardas la llave de repuesto.
- En la maceta que esta en las escaleras del tercer piso.- el niño respondió antes de darse cuenta.
-¿por que no en una maceta afuera de tu puerta?- Jack estaba extrañado.
- Todos guardan ahí sus llaves, es bastante obvio.- Darrell contestó con un tono de obviedad.
- ¿Donde guardas usted las llaves señor?- Jack pregunto refunfuñando.
- Hay una lámpara en la pared al lado de mi puerta, tiene tiempo sin funcionar y no tiene tornillos sosteniéndose así que guardo las llaves en el hueco de la pared.- hablaba de ello como si fuera lo más lógico del mundo.
El moreno entrecerrados los ojos y solo los miro como si fueran un par de locos.
- Como sea, iré por la ropa del pasante, no me extrañen.- Jack se había acostumbrado a decir eso antes de apartarse de aquel par.
El moreno camino hacia el edificio y se mentalizo para subir aquellos 9 pisos, solto un suspiro y empezó su travesía.
No recordaba como había subido todo aquello la última vez que acompaño a Darrell, '¿ como es que aquellos dos hacían ese recorrido todos losdías?', 'Con razón Darrell tieneese tremendo trasero'.
