- Decide, ¡¿De quién estás enamorado?!,¿Él o yo?
En el fondo, ni el mismo sabia la respuesta.
- No lo se... ¡Los amo a los dos!
Un triangulo amoroso que conecta todas las puntas.
¿Quién dice que tienes que elegir solamente a uno?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jack estaba jodidamente nervioso. Esta superaba por mucho, como una de las situaciones más vergonzosas y humillantes que había tenido en su vida.
Jack estaba parado vestido con un traje de oso rosa, hubiese usado el de pato si no fuese por que era demasiado pequeño para el.
Los tobillos de piel negra eran expuestos por debajo del disfraz. Ahora bien, el oso rosa le quedaba perfecto, lo cual era molesto de admitir.
Y ahí estaba con el trasero sudoroso y unas ganas enormes de vomitar. Sin mencionar la preocupación por Darrel que en todo ese tiempo no había dicho ni una sola palabra.
- ¿Están listos?- el hombre les pregunto.- Ustedes son los siguientes en entrar. Ya saben, inicia la música y se dirigen al centro... ¡ustedes son los profesionales!- el hombre río como si todo aquello fuera demasiado obvio.-Cierto, no se por qué se los explico.- su expresión decía, "es pan comido"
En ese momento querían llorar, patalear, quitarse el disfraz y gritar a los cuatro vientos, que tan solo eran unos intrusos que se habían colado sin pagar.
Pero no. El miedo y la vergüenza era más fuertes, así que solo les quedaba estar ahí, detrás del escenario de un show que jamás habían visto.
Miraras por dónde le miraras, esa situación solo gritaba una cosa, ¡PROBLEMAS!, con letras negritas y en mayúsculas.
Jack podía sentir la mano de Darrel que buscaba la suya, aún con toda esa felpa entre ellos. Cómo pudo lo sujeto fuertemente, eso aliviaba un poco su nerviosismo.
Las luces y la música rodeaba el lugar. Darrel podía escuchar a la audiencia disfrutando del primer número de introducción.
Había niños y adultos riendo y divirtiéndose. Cabe mencionar que el lugar difería a lo que originalmente creía.
Era un enorme salón con mesas privadas, la decoración era en tonos pastel, texturas rocosas, con una combinación de flores coloridas. Las luces tenues en colores púrpura provenían de enormes piedras parecidas al cuarzo. Parecía un verdadero palacio en alguna tierra espacial.
Si lugar a dudas, Darrel entendía por que necesitabas adquirir los tickets un día antes. Todo aquello era una fantasía y mejor aún había un espectáculo musical, lleno de expertos acróbatas vestidos de sus personajes favoritos.
Darrel se sentía tan pequeño en aquel momento.
Donde se encontraban podían ver a los verdaderos actores bailando y cantando como unos profesionales.
Luces, humo, saltos mortales, piruetas y pasos de baile aquerosamente complicados. Inconcientemente apretó la mano de Jack, este también sostuvo fuertemente la suya.
- Muy bien chicos. Ya casi es su turno.- El hombre saco su celular y confirmo el tiempo. Todo aquello tenía que ser con exacta precisión.- Salen en ... tres... Dos... ¡Uno!
