yeta | chenji chilensis

tocar madera

¿Había escuchado bien? ¿Este weon sapo me estaba preguntando sí estaba en algo con el Chenle? Me reí noma y me quedó mirando como esperando una respuesta.

— Yapo dime —insistió—, si no le voy a contar a nadie.

No me confié mucho porque tenía la pura care cahuinero.

— No oh, si no estamo' en na' con el rucio —me miró cómo si no me creyera—. A todo esto, ¿por qué preguntai?

— Ah, no, por nada —la pensó antes de seguir hablando—. Es que siempre andan pegaitos, ya ni se junta conmigo.

Aer, aer, aer, ¿el Lele y el sapo se conocían?

— ¿Lo conocí hace mucho tiempo? —le pregunté, ahora el sapo era otro.

— Somos amigos desde kinder, pero ahora no me habla ni pa su lol.

Lo que más me sorprendió de esa frase fue lo del lol, ¿el rucio era lolero? Qué decepción.

Chucha, igual la pensé un poco y qué lata que por mi culpa ya no se junte con su amigo de la infancia. Pero na que hacerle, él me prefiere a mi, wuaja.

Ah, casi.

Mentira, igual debería conversar con él pa ver qué onda.

•••

El tal Mark se cambió de puesto después de haber terminado de sapear, se sentó con un loco moreno que me miraba mal a cada rato, como sí me quisiera sacar la chucha, a mi me dio wiwi pero no lo pesqué.

Estaban pasando las notas de una prueba de inglés que tuve hace unos días. Yo ya sabía que me había sacado un dos, pero igual toqué madera por sí acaso.

La profe pasó por mi puesto y me entregó la prueba dada vuelta y me dijo que quería hablar conmigo después de clase, y por la conchetumare, yo estaba que me cagaba del susto. Di vuelta la prueba y por la puta, un 2.7. No sirvió de na tocar madera, seguramente era madera de la mala.

Y ahí noma quedé, con care pena porque sabía que a mi mamita no le iba a hacer ninguna gracia el 2.7. Ya me dolía el cuerpo de imaginarme la sacá de chucha que se venía.

Esperé a que se acabara la clase pa acercarme al puesto de la profe, ella esperó que todos se fueran pa hacerla más piola creo yo. Por la chupalla, ¿qué tendría que decirme?

— Señor Park —dijo y me cagué entero con el tono de voz que usó—, ¿qué pasó? Usted fue el único con una mala nota en una prueba tan fácil.

Fácil dice la vieja culiá, sí por poco no me pregunta cuántos pelos tengo en cada ala en inglés.

— Pucha tia —le dije con mi care pena—, es que no estudié.

Me miró y vi cómo sacaba una guía de su bolso.

— Tome, haga esta guía y le puedo subir la nota hasta un cuatro —me dijo y a mi se me iluminó la cara—, tiene hasta mañana en la salida para entregármela.

— Gracias tia, si pudiera le daría un beso.

Ella me miró con las medias pepas y yo ahí caché lo que había dicho. Me puse rojito como siempre y ella me hizo una seña con la mano pa que me fuera, yo le hice caso de una y me fui saltando como Heidi, tocar madera sí sirvió de algo.

•••

oliwis, disculpen sí el cap está medio cortito, ando falta de (carrete) imaginación. igual gracias por leer y por sus votos, lxs quiero mucho <3