💔3 Recuerdos

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Su historia con Eloy estaba compuesta por centenares de momentos vividos en aquellos años, que habían pasado fugaces como ese tipo de estrellas que desaparecen sin previo aviso del universo, pero que dejan en él marca con su rastro luminoso. Prácticamente la gente no sabía nombrar a uno si no nombraba al otro, eran esa clase de pareja en la que casi nadie recuerda cuando empezó todo, cuando comenzaron a estar juntos. Era como si siempre lo hubieran estado, tan solo recordaban su inicio los verdaderos amigos y los más apegados a ellos.

"Toda una vida" ... esas palabras pasaban de vez en cuando por su cabeza y a July le hacían gracia, ¿Realmente era así?, ¿Su vida podía limitarse a él?, ¿Su tiempo, sus recuerdos?... era como si estuviera ligada fuertemente a Eloy desde hacía muchísimo tiempo. Hacía esfuerzos para recordar y desde que era pequeña él había estado ahí, presente en su vida, en la mayoría de las tardes de su niñez en el parque, en sus numerosas caídas del monopatín, en las primeras lágrimas de amor únicamente derramadas por él, en sus ilusiones y sueños...

La cama se quedó deshecha como todo lo que estaba dentro de esa casa... corrió fugaz por los centenares de escaleras por las que había huido tantas veces de aquel lugar al que irremediablemente tenía que llamar hogar. En cambio, tenía la esperanza de no hacerlo algún día y eso la tranquilizaba, incluso la hacía feliz dentro de la medida en la que podía llegar a serlo.

Su barrio también estaba alejado del centro de la ciudad, igual que las urbanizaciones de las afueras, aunque no había comparación existente entre esas zonas y los suburbios. El lugar donde ella vivía estaba lleno de largos caminos de tierra y de inmensos descampados abandonados, pero las vistas eran espectaculares en aquel sitio en el que los altos edificios céntricos no estaban presentes, a pesar de que ese maravilloso instante solo se manifestaba en el atardecer y aún no era el momento.

Anduvo por la larga calle, en la acera de justo al lado de la valla que separaba otro de los numerosos terrenos, pero éste estaba reservado para una construcción que tardaría en hacerse, o que quizás nunca se haría. Andaba despacio, todo estaba solitario, casi nadie solía pasar por allí, aquello estaba totalmente desierto...

Pasaba lentamente el dedo índice de la mano derecha por la valla fría mientras su mente se evadía de la realidad que la rodeaba y tanto odiaba. Aquel camino y aquella soledad, sin ruidos de coches, sin las risas de sus amigos, sin los gritos de su puñetera casa, sin nadie, la envolvieron completamente. Y entonces su mente voló y con ella sus pensamientos, quedándose solamente su cuerpo llevado por los pies en movimiento hacia el fin de su largo trayecto.

Cuando se dio cuenta ya estaba muy cerca, perdida por las largas avenidas con altos árboles en fila que lo llenaban todo de miles de hojas de distintos colores. El viento, cada vez más gélido, parecía conducir sus pasos y empujarla por la gran y solitaria ciudad. Ese domingo por la tarde tenía que ir a ver a Evelyn, la necesitaba como solía necesitarla en muchas ocasiones. Los días cada vez eran más fríos y más grises. Una nostalgia extraña la invadió de repente y empezó a recordar momentos que creía olvidados en algún lugar remoto de su alma, recuerdos que podrían catalogarse de diferentes maneras; peculiares, casuales, bonitos, difíciles, pero que todos formaban parte de ella y la identificaban.

Cientos de recuerdos empezaron a revivirse en su cabeza como si se trataran de pequeños instantes que componían la película de su vida, y en cada uno de ellos sonaba una melodía diferente.

No recordó el día en que se dio cuenta de que estaba enamorada de Eloy, aquello estaba distorsionado, quizás lo había estado desde el primer momento...pero si cuando Laura se percató y se lo dijo, sus palabras fueron las que hicieron que por primera vez esa verdad existiese y fuese totalmente real.

Llevaban años siendo amigos, compartiendo casi todos los días, casi todas las horas, compartiendo los amigos y el mismo lugar precioso del parque en el que podían ser ellos mismos... pero nunca antes habían sido algo más.

Con miedo no hay libertad💔 ( Se va a mejorar, No LEER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora