En aquel invierno tan largo y frío, ellos sentían un calor especial. Lo que tenían era cada vez más fuerte, pero, aunque era irremediablemente intenso Yoel se había prometido a sí mismo que nunca más daría el primer paso. No quería arriesgarse de nuevo y volver a perderla.
_ ¿Lo entiendes mejor? _le dijo July sonriente, eran casi las nueve de la noche y estaban a punto de cerrar, ese día se habían quedado hasta muy tarde repasando literatura.
_No demasiado.
_Sí, mira, aquí en este párrafo quiere decir que cuando la mira se detiene todo a su alrededor, y en este otro que tiene miedo de que eso que siente pueda matarlo _dijo explicándoselo claramente, aunque él no lo veía tan claro.
_A mí me cuesta verlo, tú enseguida le encuentras sentido a cada frase.
_Sí, la verdad es que me resulta fácil _dijo sonriente.
_A mí en cambio no, me cuesta encontrarle el significado, yo soy más de matemáticas, para mi es sencillo porque solo tengo que buscar un resultado.
_Yo soy pésima en buscar resultados.
Los dos se rieron, apenas había estudiantes, la biblioteca estaba desierta y más a finales de febrero, uno de los meses en los no había exámenes.
_Es tarde, ¿Quieres que nos vayamos? _preguntó July.
_ Llevo una hora esperando a que me lo preguntes _dijo divertido y July sonrió.
Enseguida salieron fuera y se alejaron de la gran universidad a través de la larga avenida, el paseo hasta el centro era realmente bello.
Los días pasaban rápido, el invierno estaba a punto de terminar, aunque no era como todos los demás, era muy distinto.
Parecía que la calma reinaba hasta que un día July volvió a su casa y vio que su madre había vuelto.
_Has regresado... _dijo July al verla en la cocina preparando una cena improvisada, ni siquiera se giró a mirarla.
_Sí, tuve que irme, estuve trabajando lejos de la ciudad de camarera por un tiempo. Pensé en dejarte una nota, pero... bueno la verdad es que imaginé que estarías bien.
_ Estuve bien, toda mi vida he estado bien sola. ¿No? _ pregunto irónica.
Su madre miró al suelo, la abandonaba sin darle ningún tipo de explicación, simplemente desaparecía sin más y después volvía a aparecer en su vida cuando quería. Al menos esta vez no había vuelto con un nuevo novio igual que ella, borracho y drogadicto. Aunque, de todas formas, eso no significaba que no fuera a tener problemas como era habitual.
July se dirigió hacia su cuarto, era tarde, estaba enfadada, la odiaba, la odiaba de verdad. Nunca había hecho nada por ella, solamente destrozarle la vida una y otra vez.
_July, esta noche daré una pequeña fiesta en casa _le dijo Candy antes de que entrase en su habitación.
July se quedó parada sin comprender nada.
_ ¿Qué quieres decir?
_Que vendrán algunos amigos y amigas a beber unas cervezas.
July resopló, eso equivalía a un montón de cocaína sobre la mesa, botellas de alcohol, moteros borrachos y, principalmente, gente bastante adicta y conflictiva.
_Si quieres puedes coger tus cosas y marcharte ahora mismo, no sé hasta qué hora estaremos _le dijo como si nada, volvía y encima la echaba prácticamente de su propia casa.
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Con miedo no hay libertad💔 ( Se va a mejorar, No LEER)
RomantizmJuly es una preciosa y luchadora joven de diecinueve años con una vida muy difícil: padres que no se han ocupado de ella, víctima de un entorno inestable y apresada en una relación desde los trece años con Eloy, aparentemente el novio perfecto, aunq...