July se levantó, Evelyn hacía unos cuantos minutos que ya había entregado el examen, tras ella solamente quedaban tres compañeras más acabándolo. Lo dejó sobre la mesa con una sonrisa y luego salió de la inmensa aula como alma que lleva el diablo.
_ ¿Bueno qué? ¿Cómo te ha ido? _preguntó Evelyn que estaba apoyada sobre la pared blanca esperándola, llevaba un moño alto que recogía su precioso pelo moreno y resaltaba sus grandes ojos azules. _ ¿Era difícil eh?, yo me veo un aprobado justito.
_ ¡Me ha ido genial, me lo sabía todo! _ dijo July feliz. Evelyn la contempló y se echó a reír.
_ ¡Me alegro! De verdad que te miro y no te reconozco. ¿Tú eres mi amiga negativa? ¿Esa que mira al mundo y siempre ve cosas malas?
_ ¡Qué tonta eres! _exclamó divertida.
_ ¿Qué haces ahora? Podríamos ir a mi casa y ver alguna serie ¿Por qué no te quedas a dormir?
Eran tan solo las cuatro y media, solían poner siempre los exámenes por las tardes y odiaba esa maldita costumbre.
_No puedo, he quedado. Voy a patinar.
_Que extraño en ti _dijo irónica.
_No voy a las pistas, y no voy a patinar con el skate.
_ ¿Entonces? _preguntó Evelyn sin entender nada.
_Voy a patinar con patines.
_ ¿Tú con patines? ¡Definitivamente tú no eres la July que yo conozco! _gritó completamente loca.
_ ¡Eve! Sshhhh, van a creer que estamos chifladas con tus llamadas constantes de atención en la universidad.
_ ¿Y no lo estamos?
_Tú sí, yo intento no estarlo.
_Venga salgamos ya _dijo Evelyn y la agarró de la mano con fuerza, prácticamente bajaron corriendo las escaleras y luego caminaron veloces hasta salir por la enorme puerta que daba al campus donde había césped, numerosos bancos y podía contemplarse a lo lejos la cafetería. Todo un lugar reservado a universitarios con distintos destinos profesionales.
_Te llamaré este fin de semana y nos vemos _dijo July, le dio un abrazo a Evelyn y se adentró en el campus andando rápido hasta el final de una de las salidas.
_Vale, ¿Por cierto con quién has quedado?
July se alejó y fingió no haberla escuchado, aunque Evelyn ya lo sabía, se había dado cuenta de que su amiga pasaba mucho tiempo con Yoel. Tenía claro que había algo entre los dos, las miradas entre ellos y la sorprendente positividad y felicidad de July que nunca antes había visto en ella la delataban. Evelyn sonrió viéndola alejarse, se alegraba de que por fin le empezara a ir bien, Eloy era un canalla y sabía que no la merecía en absoluto.
July bajo por la larguísima avenida, la tarde era hermosa, un sol cálido alumbraba cada rincón, los árboles con algunas hojas otoñales supervivientes estaban intactos. Sonrió y en el fondo se sintió culpable, quizás no hacía bien, lo que se esperaba de ella era que siguiera llorando por Eloy, pero ya no podía. ¿Estaba mal lo que estaba haciendo? Solo quería sentirse mejor y empezaba a estarlo, hacía muchísimo tiempo que no se sentía así, justo desde que su abuelo aún estaba vivo.
Ya llevaba los patines en la mochila y pesaban una barbaridad, únicamente se había llevado eso y el bolígrafo para hacer el examen, que se había preparado con tanto tiempo como los demás. Pensó que haría el ridículo patinando con aquellos patines, solamente los había utilizado una vez y había sido suficiente para darse cuenta de que no era su gran pasión.
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Con miedo no hay libertad💔 ( Se va a mejorar, No LEER)
RomanceJuly es una preciosa y luchadora joven de diecinueve años con una vida muy difícil: padres que no se han ocupado de ella, víctima de un entorno inestable y apresada en una relación desde los trece años con Eloy, aparentemente el novio perfecto, aunq...