Encuentros

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Por fin llegaron gracias a las indicaciones de Jungkook, rápidamente estacionó y bajó del auto.

Golpeó la puerta- Tae abre la maldita puerta!- Su lobo lo estaba dominando, por dentro sabia que el omega sufría.

- Hey relajate- Le intentó dar pase a su casa, pero antes recibió un empujón de Yoongi, haciendo que pierda el equilibrio y caiga.

- Oye qué te sucede!- Jungkook levantó a su omega, pero cuando vió los ojos de su hyung los notó amarillos y un poco sobresalidos sus colmillos- Tienes que calmarte.

- ¿Dónde está Jimin?

- Espérate, está en el baño de arriba, el no sabía qué vendrías- Dijo Tae acomodando su camiseta.

- Tae!- La voz rota de Jimin se oyó por toda la casa.

- Ahí voy, cálmate!- Por algo grito así, |Maldición| subió lo más veloz posible solo que Yoongi lo sobrepasó.

Ese mismo, entró al baño, encontrándose con un Jimin tirado en el suelo abrazado a su rodilla y con una mano agarrando su abdomen.

- ¿Qué tienes Mochi?- Se acercó abrazándolo, las feromonas del alfa tranquilizaron en algo al menor- Ahora si dime.

El pequeño señaló, al dirigir su vista, no lo podía creer, no era estúpido como para no entender lo que sucedía|Mierda|, era una maldita prueba, soltó de golpe al omega, estaba arruinado.

Jungkook al notar esto, casi se desmaya, entendía todo, sabía que su madre despreciaba a Jimin, con esto solo fue una excusa para echarlo de su hogar.

Yoongi tomó la prueba y efectivamente, Jimin estaba en cinta- Jimin, dime que no es cierto.

El pobre volvió a llenar sus ojos de lágrimas, nadie lo quería, ni a él ni a su hijo- Qué no es obvio!

- Pero somos muy jóvenes.

- Ya lo sé, si no me ayudarás entonces lárgate!

- Y..yo~- Bajó la cabeza- No puedo, perdóname.

- Entonces márchate con esa resbalosa beta, yo veré que hago.

- Si quieres podemos deshacernos de él- Apuntó a su abdomen.

- Estás loco!- Comenzó a reír Jimin- Crees que mataré a mi hijo, NUESTRO hijo, por favor, esa es la única solución verdad? Eres un patán Min Yoongi.

- Disculpa, no quise decir eso, necesito pensarlo.

- Ya lo dijiste, sé que no cuento contigo así que lárgate de una buena vez! Total, ni falta te haré.

- Jimin, podemos buscar otra solución, además lo de la estúpida beta fue un mal entendido, no es lo que crees.

- No! Quiero que te vayas- Salió del baño corriendo y se dirigió a la habitación que le asignó su amigo para encerrarse.

- Abre!- Golpeaba la puerta.

Solo se oían fuertes sollozos, eso le partía el alma a su hermano que harto de todo, tomó del hombro con fuerza a Yoongi y lo sacó de la casa de su omega, quiso pelear pero Jungkook era más alto y pues entrenaba, además estaba en shock, no asimilaba la noticia.

- Hermano déjame entrar, ese idiota ya se fue.

Después de un rato, abrió, lo primero que hizo Jungkook fue abrazar a su pequeño hermano, no por edad, sino por su estatura, Tae llegó con una taza de té para calmar a su amigo.

- Pequeño, todo estará bien, yo los protegeré- Decía el alfa, no era muy pegado a su hermano por culpa de sus padres, pero siempre lo cuidaba discretamente.

Todo y nada // Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora