Hope

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Jimin se fue en busca de sus nuevos amigos, tal vez a desahogarse, desaparecer un momento de ese ambiente tóxico que lo consideraba asfixiante, y más aún con la presencia de su hermano mayor, la vida le jugaba sucio otra vez, ya no le alcanzaba en las manos el número de fallas en su vida, acaso su alma era el problema?

Ya lejos se percató que no conocía la dirección y pues que mejor idea que llamar a Changbin, su nuevo y también mejor amigo.

Se encontraron, al inicio el silencio en el auto era incómodo pero el alfa como todo un caballero que es soltó una pregunta con un rostro más relajado como para calmar la situación.

- Y cómo están? - Dirigió su vista al vientre.

- Creo que bien- Acarició su abdomen aun plano.

- Crees?- Levantó una ceja.

Sonrió nervioso, no tenía respuesta a ello, haciendo cuentas, había sido un completo irresponsable, le faltaba ir al médico para que lo evalúen y lleve un control prenatal, solo fue cuando se descompesó, pero no habló con el resto sobre asignar un lugar especifico donde se tratara su embarazo, sin embargo este ni siquiera recordaba exactamente el número de semanas de su bebé allí adentro.

- Habla Park Jimin- Finalizó con una sonrisa cálida.

- Disculpa, ni siquiera he ido al médico por mi cuenta, estuve pendiente a otras cosas que no me preocupe por mi bebé- Tal vez sean síntomas del embarazo pues comenzó a llorar luego se enojo para finalmente culpar a su familia de todo, aunque en el fondo sabía que el fue el mayor responsable.

- Más tranquilo?

Solo asentí, ya relajado, me dedicaba a observar por la ventana, el camino era un hermoso paisaje que mis ojos fotografiaban para guardarlos en mi memoria, cosa que se imaginaba con su bebé, tener en mente los momentos importantes que en un futuro compartiría con su única familia.

- Te parece si mejor vamos a mi departamento- Mi aroma reflejaba temor, no es normal que un alfa te ofrezca eso - Pero no te asustes, no haré nada, solo para que pases la noche ahí, ya temprano iremos al obstetra, yo conozca una, para que te revise, luego iremos al campo, qué opinas?

Así cambia la cosa.

- Vale, en serio gracias- Lo miré a los ojos- Juro que quiero abrazarte.

Solo nos quedó seguir, cambiar el rumbo, nunca había ido a su hogar.
Al llegar, vi el gran edificio, recuerdo claramente en número del piso, 5 del 512, todo era acogedor, preparó Ramen, luego me dirigió al cuarto de invitados, allí nos quedamos charlando, un poco de todo, cambiando de tema sin querer, se sentía como estar en un verdadero hogar.

- Qué te gustaría que fuera?

- La verdad, no me importa, solo deseo que nazca bien y que de grande sea un alfa .

- Yo creo que eso depende del destino.

- Lo sé, aún así no quiero que sufra, los omegas muchas veces son despreciados.

- Por qué dices eso?

- Verás, no es para que sientas pena o algo por él estilo, lo digo para que puedas comprender mis ideas.

- Ok, prosigue.

- Yo soy el hijo del medio en mi familia, mis hermanos son alfas respetables y bueno, desde que me presente mis padres me despreciaron más desdé que se enteraron, el único que me ayudaba era mi abuelo pero murió, ya no tenía sentido mi vida, así que cambié totalmente hasta que conocí a Yoongi, creí que era mi destinado, me entregué a él como un imbecil- Soltaba palabras hirientes sin embargo no derramó ni una sola lágrima, su cuerpo se acostumbraba al sufrimiento- Y pues ya sabes lo que ocurrió después, me echaron y pues Yoongi, aún no tengo decidido que pasará entre nosotros.

Todo y nada // Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora