En un Caballo Palido

Capitulo 24

"

 ¿ Tú qué? "

Harry pensó que estaba siendo perfectamente razonable en su asombrada incredulidad. Por la mirada de confusión en el rostro de Death, la entidad no estuvo del todo de acuerdo. Harry respiró para calmarse mientras se recordaba a sí mismo, de nuevo, que la Muerte no era humana, no se adhería a la moral humana, y que intentar mantenerlo dentro de los estándares humanos era inútil. No ayudó mucho.

"Déjame entenderlo." Harry estaba muy orgulloso de su tono uniforme y sin confrontación. "Anoche, mientras dormía de mi agotamiento emocional y mental, retrocediste varias horas en el tiempo ", aquí Harry miró a la Muerte para aclararlo, y fue respondido con un asentimiento sonriente, "pasaste tres horas y veintisiete minutos, "otra mirada a la Muerte, esta vez preguntándose por qué el ser se había molestado en especificar esa cantidad exacta de tiempo," asustando a la tía Petunia al acecharla desde la ventana de la cocina, luego tú ... "Harry se calló, preguntándose cómo redactar la siguiente parte correctamente. . "Luego le quitaste el alma a la tía Petunia, procediste a partirla por la mitad y comiste parte de ella, repitiste el proceso con el tío Vernon y luego barajaste las de mis parientes.

"Ese es un resumen exacto de los hechos, sí" , admitió Death, sin vergüenza.

No es que Harry realmente hubiera esperado que se sintiera avergonzado , pero tal vez algún tipo de culpa o vaga inquietud hubiera sido agradable. Esto era bastante diferente a aterrorizar a los duendes o emboscar a Voldemort en su oficina con el expreso propósito de eliminarlo de la existencia. Esto se había hecho con la intención deliberada de dañar , y no tenía la excusa preparada de que el objetivo era malvado para contrarrestarlo.

No lo malinterpreten, Harry estaba completamente a favor de Dursley-Vengeance, pero siempre que tenía fantasías sobre algo así, generalmente incluía pociones de modificación de comportamiento, transfiguraciones semipermanentes de humano a animal y posiblemente convencer a los perros de la tía Marge de que en realidad eran ardillas rabiosas. Nada a lo que Harry se le hubiera ocurrido nunca que estuviera a la altura de mutilar sus almas y ponerlas de nuevo en los cuerpos equivocados.

La boca de Harry se abrió y se cerró un par de veces mientras trataba de pensar en algo apropiado que decir. ¿Qué había que decir realmente? Buen trabajo ? ¿No lo vuelvas a hacer ? ¿Puedo recordarlo para poder verlo ?

"Ah, veo que te quedas sin palabras de gratitud", anunció la Muerte en el silencio, sonriendo como si acabara de ganar un premio. "No hay necesidad de agradecerme, caparazón", proclamó la Muerte magnánimamente. "Fue un gran placer para mí castigar a los descuidados mortales por sus pasadas transgresiones contra ti".

Harry soltó una risa de incredulidad. En realidad, no podía molestarse demasiado por el destino de los Dursley, considerando todo. Lo habían tratado como a un esclavo personal ya que era lo suficientemente alto como para alcanzar la estufa con la ayuda de un taburete, lo habían obligado a vivir en un pequeño armario infestado de arañas durante diez años de su vida, y prácticamente hicieron todo menos golpeándolo en la cara para obligarlo a obedecer sus caprichos.

Tal vez si la Muerte le hubiera hecho esto a otra familia a la que Harry no detestaba con una pasión ardiente, estaría más preocupado por eso. Como, digamos, si la Muerte le hubiera hecho esto a los Weasley, oa los Granger, habría habido muchos más gritos involucrados en esta conversación.

Además, consideró Harry, animándose, no había absolutamente ninguna forma de que Dumbledore intentara obligarlo a volver con ellos ahora. Petunia , ¿eh, Dudley? Vernon? Vaya, ese fue un pensamiento extraño. Harry cuidadosamente no lo consideró más, nunca lo dejaría volver a la casa después de que esto hubiera sucedido.