3%

19 8 0
                                    

nos acumulamos todos en la cima de unas escaleras, iba charlando con Ron cuando un niño un poco más bajo que yo, pálido y con el pelo prácticamente blanco, se me acercó.

— ¿es cierto? llevo todo el trayecto escuchando que Harry Potter estaba en el tren, y supongo que eres tú, ¿no?

me quedé atónito, mirándolo. ¿en serio la gente se pasó todo el trayecto hablando de mí? ¿por qué? esto de no saber nada me está agobiando, igual debería investigar sobre todo esto.

— si.

respondí con simpleza. mis ojos captaron la presencia de otros dos chicos, corpulentos, parecían vulgares. estaban situados a ambos lados del rubio, como si fueran sus guardaespaldas. al parecer el albino notó que los estaba observando, pues dijo:

— oh, este es Crabbe y este Goyle, y mi nombre es Malfoy, Draco Malfoy.

me sonrió, y sin embargo no me pareció una sonrisa de amabilidad, sino de burla, cinismo o algo así. Ron, quien aún estaba a mi lado junto a Hermione, tosió para disimular una risita, al parecer el significado de su nombre le hacía gracia. la cara del de ojos grises cambió. miró mal al pelirrojo y seguidamente, con el tono de voz más cínico que escuché en mi vida, dijo:

— ¿te parece divertido mi nombre? ni siquiera necesito preguntarte quién eres. mi padre me habló de tu familia. dijo que todos los Weasley son pelirrojos, con pecas y con más hijos de los que pueden mantener.

después de decir eso y callar a Ron, se volvió hacia mí, con la misma sonrisa de antes y habló, esta vez en un tono más calmado.

— pronto descubrirás que algunas familias de magos son mejores que otras, Potter, no querrás hacerte amigo de los de la clase indebida. yo puedo ayudarte con eso.

extendió su mano hacia mí, y sin embargo no la acepté, no se la estreché. fruncí el ceño y pasé mi brazo por los hombros de Ron, apegándolo a mí.

— creo que puedo darme cuenta solo de cuáles son los indebidos, gracias.

respondí cortante. un tono rojo apareció en sus mejillas, pero no era rubor, estaba enfadado, rabioso, por no haberme hecho su amigo. frunció el ceño y me observó directo a los ojos, su mirada imponía mucho aún siendo yo más alto.

— yo tendría cuidado si fuera tú, Potter. a menos que quieras acabar como tus padres, claro. ellos tampoco sabían lo que era bueno para ellos, tú sigue con gentuza como los Weasley o Hagrid y terminarás igual.

sin darme tiempo a decir nada, me guiñó un ojo y se marchó, seguido de sus "guardaespaldas".

Hermione, quién había permanecido callada durante todo el rato, se acercó a Ron y le susurró algunas palabras que yo no pude escuchar, pero que hicieron sonreír al pelirrojo.

la gran puerta que tenían enfrente se abrió, dejando pasar a una alta, de cabello negro y túnica color esmeralda.

— bienvenidos a Hogwarts. el banquete de comienzo de año se celebrará dentro de poco, pero antes de que ocupéis vuestros lugares en el gran comedor debéis ser seleccionados para una casa. La Selección es una ceremonia muy importante, pues, mientras estéis aquí, vuestra casa será como vuestra familia. tendréis clase con esa casa, dormiréis en el dormitorio de esa casa y pasaréis vuestro tiempo libre en su sala común.

hizo una breve pausa para luego seguir hablando, su expresión seria aún permanecía fija en su rostro.

— las casas son Grifffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin, cada casa con su propia noble historia y cada una ha producido notables brujas y magos. mientras estéis en Hogwarts, vuestros triunfos conseguirán que vuestra casa gane puntos, mientras que cualquier infracción a las normas hará que los pierda. al finalizar el año, la casa que haya obtenido más puntos ganará la Copa de las Casas, el cual es un gran honor. espero que todos estéis orgullosos de vuestra casa, es lo más importante.

otra pausa, esta vez hicimos contacto visual y podría jurar que noté sorpresa en su rostro.

— la ceremonia tendrá lugar dentro de pocos minutos en el gran comedor, delante del resto del alumnado. os sugiero que, mientras esperáis, os arregléis lo mejor posible.

y sin más, salió por la misma puerta por la que entró, dejando atrás una nube de murmullos que aumentaban cada vez más su volumen.

— ¿una prueba? ¡acabamos de llegar!

dije tragando con dificultad me parecía increíble todo lo que estaba pasando.

slytherin - harco/drarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora