fragment's (kookmin)

°Capitulo 43°

CITA CLANDESTINA

Pov: jimin

El reloj marcaba las 12:46 am. Cuando termine la llamada, hinale profundamente y exhale lentamente, asta que no quedará más oxígeno en mis pulmones, mire una vez más el cielo, las estrellas eran aún más notorias y los grillos cantaban con más fervor; mi estómago comenzó a dar vueltas y vueltas, era la segunda vez que vería a Jungkook en un solo día...

¿Cómo le haré para salir de aquí sin que papá se dé cuenta? ¿Qué le diré si me descubre? ¿Qué le diré a Jungkook? ¿De qué hablaríamos?, Me pregunte.

Había muchas dudas, pero no sabía por dónde empezar, ni siquiera sé si seré capaz de hablar, estár cerca de Jungkook me pone mal, él tiene ese algo que hacía que todo a nuestro alrededor desapareciera.

Me levanté lentamente, sacudí mi trasero y peine mis cabellos hacia atrás, baje las escaleras metálicas de caracol, de la azotea con sumo cuidado de que mis pasos no hicieran eco, al terminar de bajar camine de puntillas cerca de la habitación de papá, pegue mi oreja a esta, para asegurarme que papá ya estuviera profundamente dormido, y efectivamente, sus ronquidos se escuchaban por todo el segundo piso, como si de un león se tratara, sonreí ligeramente y de nuevo en puntillas me apresuré a llegar a mi habitación, cambie mis pantalones por unos oscuros, para poder camuflajiarme y volverme más escurridizo, tome una chaqueta del mismo color y salí de mi habitación.

Me dirigí a las escaleras que llevaban al primer planta con cuidado de no tropezar, por lo oscuras que estaban y caer, pues me daba más miedo ser descubierto que rodar por estas, así que baje muy, muy, pero muy despacio.

Cuando estuve ya en la primera planta, utilice la luz de mi celular, que la verdad no me ayudó de mucho pues me golpeé con la mesita de centro que estaba en la sala, me mordí los labios para no gritar y maldecí en mis adentros, cuando paso el dolor, solté todo el aire que retuve y que no sabía que tenía; avance hacía a la puerta, ya estaba a unos pasos de estar afuera...

Deslice el pasador de la puerta cuidando que no se escuchará al chocar el límite, la puerta se abrió, salí de la casa, con una sonrisa victoriosa y haciendo un bailecito de alegría.

No obstante al parecer cante muy rápido victoria, pues al cerrar la puerta el sonido de la we lock indico que la alarma estaba colocada y para poder entrar necesitaría la llave o la clave de seguridad.

Mierda, mierda, y más mierda pensé.

No tenía ninguna de las dos, bueno luego pensaría como entrar, algo se me ocurrirá, nada es imposible para park jimin; ahora necesitaba darme prisa o se me haría tarde, está vez necesitaba abrir el cancel y este rechinaba peor que las articulaciones de mi abuela.

Deslice el pasador inútilmente con cuidado, porque terminó rechinando como siempre, que asta creo que hoy exagero, mire hacia la ventana de papá, la luz aún estaba apagada, sin embargo ya no se escuchaban sus ronquidos, eso me asusto de cierta manera así que salí corriendo de ahí, provocando que tropezara y casi callera al suelo, pero metí las manos y continúe corriendo, el maldito escándalo despertó a los perros de los vecinos haciendo más escándalo, definitivamente las cosas no están de mi lado.

Al parecer el destino me estaba dando señales, pero ya era demasiado tarde, ya estaba fuera y no tenía llaves para volver a casa.

Al pasar por la casa de taehyung, pude observar la luz de su habitación encendida, tome un par de piedritas y estampe la primera contra el cristal, espero un momento, pero nada, estampe la segunda, de igual manera nada, maldita sea, ¿Qué estará haciendo ese maldito extraterrestre? Busque una nueva piedrita y al lanzarla está golpeó la frente de tae, ¿En qué momento asomó sus narizotas? No pude evitar reírme al escuchar sus quejas.