fragment's (kookmin)

°Capitulo 47°

DE PUNTITAS
Pov: jimin

Ya habían pasado dos días desde ese mal rato con el estirado ese, dos días en los que Yoongi, ni siquiera me a llamado, ni siquiera me a llevado al trabajo con a diario, y hoy es otro de esos días ...

-Apresúrate Taehyung, llegaremos tarde al maldito trabajo- exclamé malhumorado.

-ay, que genio de mierda te cargas, te hace falta que te hagan morder la almohada, dios.- se quejó el pelirrojo con el ceño fruncido.

Ambos llegamos a tiempo al trabajo y ambos comenzamos con nuestros deberes, asta la hora de la comida.

-Ordenaré croquetas de pulpo, ¿Quieres que ordene por ti?- pregunto tae.

-Si, lo mismo por favor- pedí perezosamente.

Después de que Taehyung terminara de ordenar, se acercó a mí, sentándose aun lado mío, sobre la silla, pero con sus piernas en forma de mariposa.

-¿Sigues de mal humor?- pregunto expectante.

Negué con la cabeza.

-No, solo que... Me siento inquieto, desesperado, ansioso- cubrí mi rostro.

-¿Por lo que pasó con Yoongi y su esposo?- cuestionó el pelirrojo, recibiendo una cara de disgusto de mi parte.

Odiaba y me hervía la sangre escuchar "su esposo" en verdad lo odiaba...

-Si, le di a escoger "su esposo" - enfatice está última palabra con voz ridícula y haciendo muecas- y yo, y al parecer lo escogió a él...

-No estás seguro jimin...

-Claro que si, solamente mira, hace ya dos días que no sé de él, ni un mensaje, ni siquiera llega a su casa, lo sé porque vivo casi enfrente de su casa, por las noches las luces siempre están apagadas y por las mañana ni el carro se ve, Taehyung es más que obvio, que lo escogió a él.- Quise hacerme el fuerte, pero mi gran puchero y mis ojos cristalinos me delataron.

-No seas dramático mochi, quizás se está tomando un tiempo para pensarlo bien, escoger entre su flamante esposo y su maravilloso y joven novio, no debe de ser nada fácil- comento con gracia.

Fruncí el ceño y le obsequié una mirada asesina, por su estúpido comentario, este sonrió cuadrada mente mostrando todos sus dientes, levantándose con lentitud de la silla...

-¡Dos órdenes de croquetas de atún, kimchi extra y dos refrescos de cola.- la voz del repartidor le salvó la vida a tae, por hoy...

Nos sentamos a comer o mis tripas se comerían entre si, al poco rato, se me ocurrió una estúpida y muy mala idea, no estaba bien, sin embargo no era justo que mientras yo esté acá todo frustrado, desgastándome mentalmente y luchando por respetarlo, a ese idiota cara pálida y desconsiderado, cuando quizás él, esté entre las sábanas de su esposo, reconciliándose y cumpliendo sus deveres maritales.
Así que, a la mierda; sin embargo no le diré nada a taehyung, aunque él me apoye en todo, eso no me salvará del gran sermón que estoy seguro que me dará. Además, no quiero arrastrarlo en esto...

Me apresuré a comer y al terminar, recogí todo, para después ir al baño, ahí nadie va a escucharme.
Entre a uno de los cubículos, saque mi teléfono y busque el contacto de Jungkook, que lisa guardo aquella vez, lo pensé una vez más y presione el verde, totalmente decidido.

LLAMANDO A...
JK🐰

-Si, aló.- se escuchó la voz del pelinegro del otro lado de la bocina.

Mi pecho comenzó a subir y bajar por mi errática respiración, mi corazón latía tan fuerte, que estaba seguro de que me daría un infarto en ese momento.