-Sí.
-¡¿Cómo puedes decirlo tan tranquila?!
-Tienes razón, he hecho mal.
-¡Me has arruinado mi matrimonio Alicia por dios!-la reproché.-¿Te arrepientes al menos?
-No.
-¡Hija de puta!-grité abalanzándome sobre ella.- ¡No solo te acuestas con mi novio, sino que además volverías a hacerlo! ¡Contrólate joder!
-Él no te valora ni te quiere, ¡Te hacía un favor!-respondió ella intentando esquivar las patadas y manotazos.
-Podría haberlo descubierto yo misma, ¡Tengo 25 años, no soy una niña!-grité harta, me aparté de ella y me sequé las lágrimas.-Recoge tus cosas y vete.
-Pero... ¡No tengo donde quedarme Patricia!
-¡Me da igual, vete!- Alicia se levantó del suelo y se dirigió a la habitación de invitados y cerró la puerta de un portazo. Tardo no más de diez minutos en cambiarse y recoger toda la ropa que tenía tirada por su cuarto, le lancé una mirada de odio desde el sofá y ella se limitó a irse con la cabeza alta, dando de nuevo un portazo que resonó en la soledad de mi piso.
El tono de llamada de mi móvil me sacó de mis pensamientos, así que fui a buscarlo. Miré en mi habitación, entre las mantas, en la mesilla, en el baño y en el vestidor, pero ni siquiera sonaba cerca. Me dirigí al salón resoplando y miré por toda la estancia, retiré los cojines y ahí estaba. Rápidamente contesté la llamada.
-¿Sí?
-¡Hija mía!-rodé los ojos, lo que menos me apetecía ahora mismo era hablar con mi madre.-¿Se puede saber por qué razón has echado a Alicia de tu casa?
-Dios mío,-susurré.-Nos hemos peleado mamá, no la quiero en mi casa que se vaya con Irene.
-Tu hermana está muy ocupada, de hecho estoy yo en su casa, así que aquí no tiene sitio.-respondió elevando la voz.- ¿Pero sabes lo peor?
-No mamá, no tengo ni idea.
-¡Somos portada en al menos dos revistas!
-Cuánto me alegro.-ironicé, el negocio de mi madre era algo que me importaba bastante poco.
-No lo entiendes Patricia, ¡Somos portada porque has echado a Alicia!-me gritó resignada, acto seguido me aparté el móvil de la oreja para evitar oírla despotricar.-... Y eso no es todo ¡Creen que Alicia tiene un amante!
Abrí la boca, flipando.
-¿Qué dices mamá?
-Lo que oyes, hay fotos suyas saliendo del coche de un hombre después de haberse estado besando.
-Dios, mamá, tú misma sabes que Alicia no es de sentar cabeza, será alguno de sus ligues de una noche, no te preocupes por eso.-le respondí cansada.
-Hablé con ella sobre esto...-dijo resoplando.-Solo empeora la imagen de la marca, a este paso vas a acabar modelando tu.
-¿Enserio?-pregunté alucinada, mi sueño siempre había sido ser una modelo de élite y modelar para marcas caras como la de mi madre.
-Ja, Patricia ya sabes que si quieres modelar no puedes pesar 53 kilos, debes adelgazar al menos cinco para que me lo piense.
-Mamá, ¡Pero si tienes modelos que pesan como yo!
-Cuando adelgaces me llamas, que te tengo que dejar, me llama tu prima.
-Vale, adiós mamá, te- colgó- quiero.
Me tiré toda la tarde tirada en el sofá, comiendo palomitas en honor a mi madre y viendo pelis de amor cursis y aburridas para acabar llorando. Hasta que el tono de llamada de mi móvil me volvió a interrumpir, me levanté del sofá y lo cogí de la mesa de enfrente de la televisión. El nombre de Natalia brillaba en la pantalla, me estaba llamando.
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Holaaa! Mil perdones, debería haber subido este capitulo hace días, pero estaba con la creatividad por os suelos y hasta hoy no lo he terminado, ¿Qué opináis sobre Alicia? ¿Y sobre la madre de Patricia?
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¿Cómo te pido que te enamores?
Romantizm-Perdona,-dije alejándome unos pasos.-no me gustan las mujeres. -¿Qué?-respondió ella sorprendida, obviamente después de una noche coqueteando no se esperaba una negativa, pero no tardó en reírse.-A todo el mundo le gustan las mujeres. Se volvió a a...