Como es lo usual en un día de semana y a media mañana la tienda a estado un poco vacía, para no decir que por completo. Daniel está en una esquina con su computador y papeles a su alrededor, en completo silencio.
Después de lo que paso en la mañana creí que no regresaría tan pronto pero fiel a su palabra atendió sus negocios y regreso a hacerme compañía, vigilarme o atormentarme. Ya no lo sé, mientras menos gente atiendo más pienso en lo que sucedió.
-Lena, estaba pensando en uno de los bocetos que me mostraste – desvía su vista de la pantalla – me gustaría llegar a un trato contigo, es un trabajo exquisito y funcionaria muy bien en una zona específica que tengo en mente.
-No, no está en mis planes vender, regalar o mostrar mis ideas – le respondo.
-Podrías ser muy buena y hacer mucho dinero – se reclina en la silla mirándome.
-No lo hago por el dinero – lo miro por el rabillo de mi ojo – es un plan a largo plazo, pero es el diseño ideal de mi casa, o eso es lo que tengo planeado.
Me va a responder, pero el sonido de su teléfono celular lo interrumpe. -Disculpa – dice antes de contestar y salir rápido a la calle. Suspiro, el ambiente entre nosotros está un poco tenso pero cargado de energía. Aprovecho y me miro en el espejo, he quedado de ir al salón de belleza con Mag, un vestido largo con abertura hasta el muslo, mangas cortas y escote en ''V'' de color azul oscuro, zapatos casuales una chaqueta de abrigo, el pelo suelto y un poco de brillo.
-Lena, ¿en dónde estás? - lo escucho llamarme.
-Aquí - digo saliendo de la oficina/almacén.
-Necesito salir nuevamente, una emergencia en una de las construcciones. - recoge sus cosas y vuelve a salir rápido.
11:40 am marca el reloj, me siento en donde estaba el y reviso los mensajes de mi teléfono.
''Nos vemos al mediodía''
xoxo, Mags
Conociéndola llegaría tarde a nuestra cita así que no me apresuro en ir.
-Buenas, ¿señorita Lena? – veo entrar a un chico como de 16 años con un pantalon, gorra y chaqueta que me llama.
-Soy yo – me acerco a él, está cargando con un ramo de flores.
-Estas flores son para usted - Me da un lapicero y una tablet.- Firme aquí por favor. Me entrega las flores y sale por la puerta.
Un ramo de rosas rojas, envuelto en un papel dorado y un lazo, son muy bonitas, y el olor que desprenden delicioso. Busco un envase en donde ponerlas en agua antes de irme y reviso la nota.
''No pierdas el tiempo''
Arrugo el ceño ante el mensaje, no tiene escrito ningún nombre solo ese mensaje.
Ignorándolo dejo la nota a un lado, Cuando Daniel regrese le agradeceré por las flores, pero le hare saber que no funcionara para presionarme.
Miro la hora y agarro mis cosas rápido antes de salir y cerrar, esta vez llegare tarde yo.
-Por fin llegas Lena – se queja mi hermana apenas me ve llegar.
Activo el seguro del carro y la saludo con un abrazo.
-Llegue 5 minutos tarde, no es para tanto – no sé de qué se queja si se nota que acaba de llegar.
-No importa entremos estoy muy emocionada – entrelaza su brazo con el mío y nos dirigimos al salón.
Al entrar se ve un recibidor, unos sofás, muebles, flores y una escalera que lleva al segundo piso, al final se pueden ver espejos y sillas.
Mags se dirige a la recepción a confirmar nuestras citas una vez hecho nos llevan a nuestros asientos, un espejo grande iluminado y un tocador con todas las herramientas necesarias.
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Dulce 𝒮𝑒𝒹𝓊𝒸𝒸𝒾𝑜𝓃
Romans+18. Habían pasado 10 años desde la última vez que Lena había visto a Daniel Calgary, y no era para nada parecido a como lo estaba viendo justo ahora. ¿En dónde habían quedado su cabello largo, su motocicleta, y sus botas? Después de haber dejado...