Después de escribir eso, guardó la libreta y la pluma nuevamente en su buró y después se sentó en su cama a seguir bebiendo tequila, mientras escuchaba las canciones más tristes que tenía en su playlist, su llanto no podía parar y así continúo... Hasta que lo venció el sueño y se quedó profundamente dormido.
Días después:
Lucero y Michel venían de regreso de su viaje. Llegaron al Aeropuerto de México, y un grupo de reporteros de los estaba esperando. Lucero y Michel confirmaron lo que ya se sabía, que su relación sentimental, continuaba.
-Oiga, de repente la ve trabajando con Mijares, le darán celos?- Preguntó una reportera.
Michel se puso nervioso e incómodo con la pregunta.
-No cómo celos al contrario, un orgullo que hagan cosas tan bonitas. La verdad lo están haciendo muy bien, y son una pareja fantástica, y pues qué le puedo decir, lo que se ve no se pregunta- Respondió.
Lucero llegó a su casa.Lo primero que hizo fue mirar hacia el enorme ventanal, que daba la vista hacia la casa de su vecino Manuel Mijares.
En algún lugar de "El paso, Texas".
-Manu, me alegra muchísimo que hayas venido a visitarme, aprovechando que tendrás la gira de conciertos con Cristian Castro, aquí en Estados Unidos-
-Me gusta mucho tu compañía, Lupita. Disfruto mucho el tiempo que comparto contigo, eres extraordinaria- Dijo Manuel, dedicándole una tierna sonrisa a Guadalupe.
-Ahhhhh- Suspiró Guadalupe. -Tienes una sonrisa tan bonita-
Manuel se sonrrojó.
-Gracias por el cumplido-
-Te lo digo sinceramente, me fascina tu sonrisa, Manu-
-Tu sonrisa también es muy linda- dijo Manuel.
En ese momento sonó el timbre.
-Yo abro, Manu-
Guadalupe fue a abrir la puerta.
-¡Mamá! Pero qué sorpresa tan linda- Dijo Guadalupe con una enorme sonrisa.
-Hola mi vida, ¿cómo estás?- Preguntó la madre de Guadalupe.
-¡Increíblemente bien, mamita! Ya estaba teniendo un magnífico día, pero tu visita resultó ser tipo la cereza del pastel, para que mi día terminara siendo perfecto- Contestó Guadalupe.
-Me alegra verte tan contenta-
-Pero pasa mamá, por favor pasa-
La madre de Guadalupe entró a la casa.