Un nuevo día

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-Bueno, aquí estamos

Yoongi finalmente había llegado a su nuevo trabajo, era su primer día, estaba un poco nervioso, pero no iba a permitir que alguien lo viera de una forma inferior, tomó aire y cambió su semblante a uno serio e imponente.

Era invierno y Yoongi sacudió sus botas de nieve en la entrada, dejó su abrigo a un empleado y se dispuso a hablar con la señorita encargada en la recepción

-Buenos días- dijo de manera fría

-Buenos días, ¿en qué puedo ayudarlo?

-Soy Min Yoongi y...

-Oh si, señor Yoongi disculpe no le reconocí. El señor Park me a pedido que le entregue esto -dijo dando un par de papeles en un sobre-

Yoongi lo abrió y pudo ver una serie de instrucciones de como llegar a su oficina, un mapa con todos los pisos del edificio y una lista con peticiones del trabajo de ese día.

-Gracias- dijo con un asentimiento de cabeza

Hizo lo indicado y tomó el ascensor, siguió las instrucciones hasta finalmente llegar ante las puertas del despacho del jefe y el Alfa que le había solicitado, Park Jimin.

Yoongi sabía que no estaba a la altura de Jimin, si bien se había asegurado un puesto importante en el ámbito económico, y social; no podía superar a tal Alfa, además estaba atrapado en el medio, a decir verdad Yoongi poseía muchas inseguridades, siempre disfrazadas con ambición y agresividad, pero no conocía su lugar, no era dulce, amable y fino como un Omega, pero tampoco era fuerte, poderoso e imponente como un Alfa, era un Beta y en algún momento debería por decidirse en tomar un rumbo que se acercara más a uno de los dos, pero el casarse y tener hijos era lo que menos preocupaba al Beta, aquel tema siempre le pareció absurdo.

El Beta miró las puertas labradas en mármol frente a él, su mirada se volvió afilada y dio su mejor postura llamando a la puerta, siempre intentado parecer seguro de lo que hacía.

-Adelante- comunicó el Alfa

Yoongi abrió la puerta y se adentro a tan inmenso y lujoso despacho, Jimin estaba sentado, con un semblante calmado detrás de su enorme escritorio y detrás de él, estaba un hermoso ventanal tan enorme y limpio que parecía un espejo que reflejaba toda la hermosura de la ciudad, de esa manera hacía ver a Jimin que tenía a toda la ciudad sobre su poder, siempre detrás suyo.

-Joven Park Jimin

-Min Yoongi, me alegra que esté aquí finalmente, necesitaba a alguien competente a mi lado y me alegro de haber encontrado a el mejor hombre para este trabajo. Solo eh escuchado maravillas sobre usted y su trabajo.

-Me honra escuchar eso Joven Park

-Por favor, llámame Jimin

-De acuerdo, gracias...Jimin

-Veo que eres alguien responsable y puntual

-Todo lo que hacemos habla sobre la persona y no busco nada más que mejorar

-Pues estoy impresionado. Sabes, todos mis contadores y consejeros han sido un desastre, en verdad siento que ninguno hacía su trabajo, yo siempre eh elegido lo mejor para la compañía, solo necesitaba orientación pero nunca eh encontrado lo que busco. Usted es mi única esperanza.

-Espero no decepcionarlo

-Yo también espero eso...así como espero que sepa lo que está en juego al aceptar este trabajo

-Me temo que no comprendo a lo que se refiere

-Todos los demás antes que usted han durado en su puesto solo un mes, si usted llega a superar mis expectativas en ese tiempo, tenga por seguro que su influencia será destrozada por mi, este trabajo es el más importante que tendrá en su vida, si lo despido también dígale adió a todo su trabajo y el camino que con tanto esfuerzo ah construido. ¿Y bien Yoongi?, ¿Qué tienes que decir ante esto?

-Acepto el reto Jimin, no me rendiré, le aseguro que yo no soy como los demás

-Pero que interesante respuesta, ni siquiera titubeó, veo que es alguien seguro de sí mismo, capaz e inteligente para tomar las riendas de este pueblo...bien, recuerde que esto es una prueba y si la falla, su vida y su facilidad para encontrar trabajo se acabó, pero si logra satisfacer las necesidades de mi compañía y llena mis expectativas, usted y yo tendremos todo el poder en nuestras manos. Le ofrezco algo que no tiene igual, poder, dinero, deseo, ambición. Suerte Min Yoongi.







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