Más que solo negocios

Perdóname

A la mañana siguiente, Jimin se despertó primero, sabía que Yoongi tardaría un buen rato en volver a abrir los ojos sin embargo ya no tenía tanto miedo como antes, podía sentir a su esposo mucho más tranquilo y animado, poco a poco recobraba sus fuerzas y un mejor ánimo, a la vez que ambos ya no se sentían solos, habían recobrado el apoyo y amistad incondicional de Hoseok, por lo que Jimin sabía a quien podía acudir en caso de emergencia.

Jimin tomó aire y con un semblante mucho más tranquilo dejó descansar a su esposo, le dio un beso en la mejilla, se alistó, se bañó y bajó para prepara el desayuno, la mañana pintaba de maravilla hasta que el sonido del timbre llamándolo lo sacó de su burbuja, Jimin sonrió pues pensaba que se trataba de Hoseok, así que se apresuró a abrir la puerta, pero al estar cerca algo cambió podía reconocer el aroma del otro lado de la puerta, con muchas dudas Jimin abrió.

Tal como lo imaginaba se trataba de su madre.

Ambos Alfas se quedaron mirando en unos segundos incómodos, sin saber que decir, en especial Jimin quien tenía rencor hacia su madre y su corazón la responsabilizaba de ser el problema principal que llevó a Yoongi a cometer una locura tan grande como implantarse hormonas Omega en exceso solo para complacer la ambición y deseos desesperados de la matriarca Park

-¿Qué quieres?- dijo de manera fría y molesta

-Jimin...y-yo eh venido para verte a ti y a Yoongi- comentó tambaleante

-No necesitas verlo

-Jimin...

-Y como puedes ver estoy bien, gracias por venir- Jimin iba a volver a cerrar la puerta pero su madre se interpuso

-¡Jimin por favor no me trates así!

-¿Cómo te atreves a venir después de lo que provocaste?

-Y-yo no sabía lo que hacía, jamás imaginé que algo como esto llegara a pasar

-¿¡Jamás lo imaginaste?! claro, como siempre tú solo piensas en ti misma, demostrando el ser tan egoísta que eres, jamás te pusiste a pensar en lo que yo quería, en lo que Yoongi quería, solo te metiste en nuestra relación, como siempre... incluso desde que yo era un niño me formaste como tú quisiste, jamás pude hacer las cosas que a mí me gustaban, jamás fui lo suficiente Alfa para ti; Yoongi a sido la única elección libre que  eh tenido, es lo único más hermoso que me ah pasado por decisión propia y tú lo tuviste que arruinar

-Hijo... y-yo no lo sabía

-No lo sabias porque nunca escuchas, no escuchas a nadie más que a tus propios deseos

-No quería que nada de esto sucediera, en verdad perdóname

-No digas esas tonterías, madre, por favor escúchate... tu provocaste que Yoongi no tuviera otra alternativa más que inyectarse hormonas Omega, estaba asustado, desesperado por obtener tu aprobación y respeto, cuando tú no mereces ni siquiera ver a un ser tan puro y amoroso como él, lo amenazaste, tú y tu estúpido tratado 21, tú y tus estúpidas ideas de superioridad, lo había pensado antes, pero ahora finalmente tengo el coraje para decirlo. ¡Odio ser un Park!, me avergüenza saber que mi familia a lastimado tanto a nuestra sociedad, afectándola cada vez más, dividiendo a las personas por su jerarquía, eso es estúpido, menospreciamos a los Omegas, sobrexplotamos a los Betas y los Alfas deben ser presionados para ser perfecto y tener una responsabilidad tan grande que debemos tomar desde cachorros, tú me quebraste la mente, me hiciste llorar todos los días, todas las noches cuando era un niño, nunca pude jugar, jamás hice amigos, nuca disfruté de mi niñez, nunca me llevaste a cenar, a tener un momento de calidad en familia con mi padre y contigo, cuando mi padre murió reprimiste mis lágrimas no me diste ni siquiera un día de luto, de inmediato tuve que empezar a trabajar porque según tus palaras era el Alfa perfecto, el Alfa que preparaste por años para tomar el control de la ciudad, tenía 17 años cuando eso ocurrió, carajo era tan solo un joven estúpido que deseaba salir, explorar, enamorarse y tú solo impusiste reglas y más estúpidas reglas. 

¡Me manipulaste!, todas las reglas de mi compañía no las puse yo, sino tú y nunca tuviste el corazón para amarme y pedirme perdón, incluso cuando mi esposo, la persona que más amo cayó en coma, tampoco conté con tu apoyo, no me abrazaste, no me diste ningún consejo o consuelo, durante todo un año jamás fuiste a visitar a Yoongi y si el fallecía tú estabas dispuesta comprometerme con alguien más sin escuchar mis deseos, sin importar que te advertí que yo sería capaz de quitarme la vida si algo le sucedía a Yoongi, pero él no significa nada para ti, solo lo viste como la oportunidad perfecta para tener a tus nietos, y sabes estoy feliz de que Yoongi no haya quedado en cinta ya que de haber sucedido estoy más que seguro de que tú me los hubieras quitado, me hubieras separado de mis cachorros para formarlos tal y como hiciste conmigo, sin amor, sin hogar, en un estúpido internado donde preparan al Alfa perfecto, frívolo, sin sentimientos, egoísta, patán y un abusivo con el resto de jerarquías y me da asco el tan solo pensar que mis hijos hubieran caído en tus manos.

Yo quiero a Yoongi sin importar nada, si el no me da cachorros no me importa, buscaremos la manera de tener un heredero en su momento cuando el quiera y esté listo y si él llega a darme hijos, te prometo madre que no permitiré que te acerques a ellos, así como no te permitiré que vuelvas a ver a Yoongi.

De ahora en adelante preferiré ser un Min a ser un Park

Jimin estaba envuelto en rabia, estaba tan furioso que lloró al gritar lo que siempre quiso a su madre, azotó la puerta y se desplomó en llanto, estaba decepcionado y asustado por lo que acababa de pasar.

Su madre quedó en silencio, devastada al otro lado de la puerta, dio la media vuelta y se marchó, pero no se daría por vencido tan fácilmente, volvería para intentar enmendar todos los problemas que provocó.