Empecemos a cambiar

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Aquel día no solo fue un despertar y un comienzo nuevo para Yoongi y Jimin, sino que esto despertaría un cambio verdadero en todos ellos.

-¡Jin!-

-¡Yoongi!

El Omega entró como enloquecido a la habitación en cuanto miró a su mejor amigo y primer amor, se postró ante él y Hoseok al ver su enorme desesperación por librarse de las mangas de la camisa de fuerza lo desató y Jin le otorgó el más fuerte y dulce de los abrazos a el Beta, juntos comenzaron a llorar, disculparse y decir lo mucho que se extrañaban; todo había quedado en el pasado, Yoongi en serio disfrutaba de la compañía de su amigo y el sueño de Jin de ver a Yoongi despierto de nuevo se había realizado, se sentía tan bien que era casi irreal podía sentir como todos los males y enfermedades que lo alcanzaban finalmente de disipaban, Yoongi tenía un don y había curado su corazón. 

Sin necesidad de formular grandes palabras el simple hecho de mirarse tiernamente a los ojos y llorar los sentimientos que atrapaban juntos fue suficiente para perdonar cualquier error, culpa o discusión que estuvieron guardando hasta ese día en su corazón.

Jimin estaba feliz, se sentía orgulloso de si mismo por permitirse perdonar y regalar esperanza a el ser que amaba a través de otro ser que resultaba tan importante para él casi como él mismo lo hacía sentir, y por eso el Alfa pudo comprender que el amor se manifiesta en diferentes circunstancias y tamaños, personas y figuras y que toma diferentes nombres pero el sentimiento sigue siendo igual de poderoso.

Jimin se paró detrás de su esposo, reposó su mano sobre su hombro y miró alegremente a Jin y Hoseok diciendo:

-Kim Seokjin, Jung Hoseok ustedes han hecho tanto por nosotros y significan tanto para nosotros, que de ahora en adelante queremos que sean parte de nuestra manada. ¿Nos harían ese gran honor?

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