Día 1. Primer beso

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De algún modo habían logrado sobrevivir a todo el caos que la ciudad representaba en ese momento, de algún modo se las arreglaron para salir victoriosos, pero al mismo tiempo lo habían perdido todo. Una mujer había huído con su submarino y todo lo que había dentro de él; cualquier clase de poder que alguno tuviera antes se había esfumado, y sin dinero no había forma alguna en que pudieran restaurarlo.
Había pasado los últimos meses junto a Oswald, huyendo del nuevo orden que Gordon imponía en Gotham, ocultándose de la policía y de si mismo.

Era consciente de que, cuando volvió para pelear, lo había hecho por Oswald, no porque lo necesitara para poder escapar; no, sabía que no era necesario que dos personas manejaran aquel submarino, porque quería escapar con él. No había vuelto a luchar por Gotham, había vuelto a luchar por Oswald, y el solo saber que aquellos sentimientos estaban ahí después de todo, lo aterraban, los había estado reprimiendo tanto tiempo, negándolos, ¿cuanto tiempo habían perdido debido a su incapacidad para notar sus sentimientos? Y tal vez ya era demasiado tarde, tal vez Oswald no estaba dispuesto a ser vulnerable con él una vez más, no lo culparía de ser así, después de todo, había usado todo aquello que el más bajo le confió para destruirlo, para demostrarle que no era capaz de amar, y que al final le demostrara lo contrario, y que lo hiciera una y otra vez, que lo había amado y que aún lo hacía... Se odiaba por haber tenido que esperar a que el otro perdiera un ojo para entenderlo al fin, y aún al estar al tanto de la verdad, ser lo suficientemente cobarde como para dar un paso o al menos admitir lo obvio: que lo amaba también.

Sus pensamientos se volvían borrosos con todos esos sentimientos apareciendo cada tanto, saltando frente a él, exigiendo que los afrontase, y es que la visión de Oswald no le permitía pensar con claridad, tenerlo tan cerca de él hacía que perdiera toda su concentración, que su mente abandonara toda razón para terminar fijándose en aquel rostro filoso que lo veía incrédulo, con una parte de él dispuesta a lanzarse al otro y dejar por fin expuestos sus sentimientos mientras que la otra aún se negaba a tenerlos. Pero entre esas cuatro paredes era difícil no tenerlo cerca por lo que continuar evadiendo aquello era totalmente inútil, aunque lo había sido siempre después de todo, y una pérdida total de su tiempo, ¿por qué seguía perdiendo más?

Vio un Oswald cansado recostado al otro lado de la habitación e intentó racionalizar que debía hacer, habían pasado por tantas cosas... Incluso había sido difícil estar en buenos términos de nuevo, si lanzaba aquella bomba ¿que pasaría? ¿Se molestaría por haber desperdiciado tanto?

-Si tienes algo que decir, solo dilo.

-¿Disculpa?

-Ed- se sentó y fijó su ojo en él- has estado dando golpecitos en el suelo por varios minutos, así que si tienes algo que decir, solo dilo, y para con eso de una buena vez.

Vio su ojo y la mirada irritada que le daba, tal vez sería bueno hacer frente a todo aquello, al menos sacarlo de su sistema, tal vez al hacerlo podría volver a concentrarse, tal vez todo aquello pasaría, tal vez, solo tal vez, su amor aún era correspondido.

-¿Y bien?- caminó lentamente en dirección a quien le hablaba, para terminar sentado junto a aquella ave tan particular. Inspirando profundamente, como si aquello lo fortaleciera y le diera la valentía para hablar.

-El día que luchamos por Gotham... Sabes, sabes que volví por tí ¿cierto?- silencio -Digo, el submarino en realidad no necesitaba de dos personas...

-Ed- lo interrumpió, y pudo notar un muy pequeño rastro de temor en su tono -¿a dónde quieres ir con esto?

-¿Por qué me protegiste de la granada?

-Ye hemos hablado de esto, Edward.

-Eso no es cierto, siempre evades el tema, nunca me dices la razón.

Nygmobblepot en Mix-cemberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora