Cuando dijimos que íbamos a intentarlo solo pensé "debo encontrar la manera de que deje atrás todo ese dolor". Todavía no lo he logrado, sufres en silencio, pero los imposibles no existen, solo existen los retos difíciles.
—Emine.
Christopher James.
Mark no se había dado cuenta de que escuché su conversación con Austin, antes de irme me aseguré de que Faith lo supiera, quería que mi hermana tuviera a alguien con quién contar para esos malos momentos, incluso si ese alguien no era yo. Me hacía sentir cómodo de que fuera Mark el que la hubiera escuchado aquella noche, aunque no podía mentir, estaba celoso de que él conociera la verdad a medias y yo como un puto chismoso pude enterarme.
También me reconforta el hecho de que la chica castaña no sea una mujer interesada, ella ya sabe quién soy y aun así dejó salir que era un energúmeno. La chica castaña cada vez me sorprendía más, esa actitud defensora hacía mi hermana, solo llevaban compartiendo pocos días y ella fue capaz de hacerme frente para defenderla. Nunca había conocido a alguien así, la verdad es que, a parte de los chicos, nadie me había defendido alguna vez. Muy en mi interior agradecía que Faith tuviera a alguien de ese tipo en su vida.
Ella seguía poniéndome nervioso, pero luego de escucharla tartamudear por mi presencia podría haber descubierto que me gustaba ponerla nerviosa también.
—¿El mundo se está acabando o Chris está sonriendo de verdad? —susurra no muy por lo bajo Frankie, el tipo tenía la palabra indiscreto como segundo nombre.
—Lo dijiste muy alto, idiota, te escuchó—Dustin lo regaña, cuando él nota que los estoy observando finge leer las partituras en sus manos.
—¿Lo dije muy alto?
—Te escucharon hasta en Argentina y eso está muy al sur, Frankie
—Sé dónde queda Argentina—Frankie frunce el ceño en dirección a Mark para después dejar su bajo de lado y sacar su teléfono.
Estoy seguro de que está buscando en Google dónde queda Argentina.
—¿Tienes algo que contar? —Mark se sienta a un lado de mi asiento. A diferencia de Frankie, Mark si susurra muy bajo.
—¿Por qué lo dices?
—Porque por primera vez te he visto embozar una sonrisa real por tus pensamientos.
—Uhm, pensaba en una nueva melodía.
Falso, pensaba en la chica castaña.
—Ya veo—Mark me mira sospechosamente y poco después se levanta dejándome de nuevo solo en mi banco.
—¿Qué les parece esto?—Dustin toma la guitarra de Mark y a duras penas toca algunos acordes con ella—. Me enamoré de tu sonrisa, aunque no era dirigida a mí, sino al que más admiras. No importa, yo estoy aquí, no voy a dejar de amarte porque no serás para mí. Al final los sueños son para eso, para delirar, para ser feliz, y tú en mis sueños estás junto a mí y no te dejo ir.
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CHRIS | Four Chips #2
Romance2do libro de la saga Four Chips. La música despierta miles de emociones que en muchas ocasiones son difíciles de describir con las palabras. La música es para sentirla. Cuerdas, tambor, teclas, viento y voz, elementos importantes para que la música...