Me dijiste que la magia de la música es que puede transportarte a una dimensión diferente, en donde no sufres, eres feliz, pero la verdad es que logras hacer que me transporte con solo verte sonreír.
—Emine.
Christopher James.
Para mí era aún extraño levantarme por las mañanas y no ver a mi hermana en la cocina esperándome con el desayuno hecho y una gran sonrisa. Extrañaba a Faith, la casa no era lo mismo sin ella, se sentía vacía, ella era la única que traía vida a este lugar.
No puedo esperar para volver a girar.
Tomo mi habitual batido de proteínas sentado en los bancos de la cocina mientras ojeo un poco las redes sociales. No me gustaba usarlas sin embargo siempre estaba al pendiente de lo que se hablaba. Una vez salieron noticias sobre mi familia, algo distorsionadas pero salieron, debía evitar en lo posible que más historias de ese tipo fuesen filtradas, más si alguna de ellas se acercaba a la verdad. Austin se encargaba de mantener a raya a los curiosos y resolvía los problemas con rapidez, sin embargo esa noticia que salió hace un par de años se pasó por alto aun cuando Austin estaba de caza. Los errores podían volver a suceder, no podía permitir eso.
Mi teléfono vibra por un mensaje, deslizo las notificaciones y el nombre Piper brilla junto a la pantalla, aprieto mis labios evitando las ganas de abrir el mensaje, había sido un error localizarla nuevamente, no me dejaría en paz hasta que volviera a ella.
Ayer cuando la vi después de dos años había estado tan feliz por mi comportamiento ante la nueva compañera de apartamento de mi hermana. Me recomendó pedirle una cita, quise escupirle solo por recomendar aquello, pero no lo hice, solo dejé su lugar con la misma rapidez igual que como había llegado.
Piper ayudó a Faith. ¿A mí? Estaba lejos de hacerlo, cada vez que ella sentía que llegábamos a algo yo solo huía y la dejaba sentada con la palabra en la boca.
Un portazo se escucha en la entrada seguido de un murmullo de voces. Mark era el único que tenía una llave de mi casa, Frankie jamás tendría una después de que lo vi en el mismo espacio que mi hermana—demasiado cerca—, mientras yo no estaba y Dustin de seguro le entregaría la llave a Frankie por tan solo molestarme. Mark no me traicionaría, porque a diferencia de los otros dos sabía que no era lindo verme enojado.
Levanto la mirada de mi teléfono y el primero que veo entrar en la cocina es Dustin, toma una manzana de mi bol de frutas y se sienta a mi lado para observarme fijamente. No dice nada, solo me mira mientras come de su manzana. Tampoco le digo nada, vuelvo a mi teléfono, ignorándolo. Poco tiempo después escucho a Mark y Frankie entrar.
—¿Por qué ves a Chris como si fuera un bicho raro?
—Solo quiero tratar de entender sus emociones, yo estaría enojado si fuera él.
—Yo estoy enojado y no soy él—Frankie, por muy raro que suene, no hizo burla en nuestra última reunión. Él de verdad no estaba de acuerdo de nosotros haciendo un video clip en la universidad de mi hermana.
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CHRIS | Four Chips #2
Romantizm2do libro de la saga Four Chips. La música despierta miles de emociones que en muchas ocasiones son difíciles de describir con las palabras. La música es para sentirla. Cuerdas, tambor, teclas, viento y voz, elementos importantes para que la música...