O/Xᴛʀᴀ; Jɪsᴜɴɢ (ʜᴀᴄᴇ 4 ᴀɴ̃ᴏs)

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Había dormido con los auriculares puestos y ahora sonaba una canción que no conocía.

Me levanté de la cama mirando la hora en el móvil mientras intentaba recordar que libros me tendría que llevar hoy según el horario.

Tan solo quedaban treinta minutos para que empezasen las clases y quedaban cinco minutos para que Minho tocase la puerta preparado para acompañarme.

A toda prisa me vestí lo primero que vi. Guardé mis libros en la mochila, que afortunadamente hoy solo serían tres libros.

Corrí hacia el baño y me lavé los dientes a toda prisa. Después bajé rápidamente y encontré a mi madre envolviendo un bocadillo en papel de aluminio, para seguidamente dármelo.

—¿Hoy viene Minho? —Me preguntó con total naturaleza.

—Si —Le respondí mientras guardaba el almuerzo en mi mochila, ella sonrió y asintió. Justo en ese instante sonó el timbre —¿Papá viene a comer hoy? —Le pregunté mientras iba a abrir la puerta.

—Sí, Jisung —Me dijo saludandome con la mano —hasta luego.

—Adiós —Dije desde la puerta de la cocina —buenos dias Minho —Me giré a mirarlo sonriendo.

—¿Cómo amaneció la ardilla más bonita del mundo? —Preguntó riendo.

—Cansado, pero toma —Le dije dándole uno de los dos auriculares que antes había conectado a mi móvil.

—¿Qué tal?

—Minho —Lo llamé —nos hemos visto hace, literalmente, nueve horas ¿Sabes que he estado haciendo?

—Dormir, lo sé —Rio —pero me gusta escuchar tu voz.

—Ya...

—¿Conoces esta canción? —Me preguntó refiriéndose a la canción que sonaba.

—Minho —Reí por su pregunta —La tengo descargada.

—Ya... —Dijo pasando su brazo por mi hombro, acercándome a él —¿pero cuál es?

Marry you —Dije finalmente.

—Si quiero —Rió Minho mirándome.

—Lo que tú digas —Reí mirándolo —pero todavía soy pequeño.

—Todavía no eres legal —Rio.

—¿Y cuándo sea legal que harás?

—Pedirte que te cases conmigo —Dijo sin dejar de mirarme.

—No digas eso que me sonrojas —Le dije sonrojado apartando mi mirada de la suya.

—Nadie se resiste a mis encantos.

—Tienes razón —Reí susurrando bajando mi mirada al suelo.

Ambos reímos y dejamos que el silencio inunde la desierta calle para poder escuchar la canción.


Ambos reímos y dejamos que el silencio inunde la desierta calle para poder escuchar la canción

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saturno ;; minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora