Sectumsempra

8. QUERÍA PROTEGERTE

A la mañana siguiente, Alice se despidió de sus hijas sin querer dejarlas ir pero deseándoles un buen viaje. Después, volvió al castillo pues la noche anterior había prometido a JB preparar el desayuno a su padre. Sin embargo, FP ya estaba mucho mejor después del accidente que tuvieron y decidió pasar el día entero con su hija para compensar el no haber estado en el baile con ella. Lo que dejó a Alice sin nada que hacer durante la mañana, pasando el día sola y un poco deprimida.

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Con las vacaciones de navidad, el castillo quedó totalmente vacío. Sierra se había ido a visitar a su hija a Nueva York y el resto de profesores y alumnos se habían marchado a sus respectivas casas. Alice se hubiera quedado sola durante una semana con los lacayos del castillo si la familia Jones no residiera allí.

Los primeros días, Alice decidió pasar las mañanas trabajando en su despacho y leyendo tranquilamente para evitar mayormente a FP. Todavía no quería enfrentarse a su conversación pendiente, ni sacar a relucir sentimientos del pasado. 

Por las tardes, Alice recibía la visita de JB, que venía a verla después de comer para que pasaran la tarde juntas. JB siempre tenía un plan nuevo para cada día.

¿Qué tienes preparado para hoy, Jelly?- preguntó Alice cuando vio entrar a JB con una escoba en la mano.

¡Pelea con bolas de nieve en la escoba!- exclamó JB.

Pero...  ¿sabes volar?- preguntó Alice. JB era todavía muy pequeña, ni siquiera estaba cursando clases en Hogwarts.

¡Pues claro que sí!, papá me enseñó el año pasado, soy la mejor voladora- aseguró JB. Cuando vio a su padre y a su hermano volar y divertirse, ella también quería hacerlo. Así que le suplicó a su padre que la enseñara y descubrió que se le daba bastante bien, demostró ser una bruja prodigiosa para su edad.

Alice enarcó una ceja divertida. 

Está bien, déjame abrigarme y coger mi escoba- aseguró.

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¿Te has dejado arrastrar a esta idea?- preguntó Jughead sentado sobre un banco de piedra, mientras veía como Alice y su hermana se acercaban al claro cubierto de nieve en el que estaba leyendo tranquilamente. 

Alice no es aburrida como tú- dijo JB sacando la lengua a su hermano.

Buenas tardes Jughead, ¿tu hermana sabe volar, verdad?- preguntó Alice para asegurarse de que JB le había dicho la verdad y no se haría daño.

Ella es la más rápida. El año pasado mi padre acabó tumbado en la nieve mientras ella seguía volando cuando jugaron a este juego- aseguró Jughead.

No asustes a mi amiga, ya espantaste a papá- se quejó JB montándose en su escoba con un puchero.

Alice suspiró tranquila al notar que JB controlaba la situación.

Bueno, ¡divertíos!- aseguró Jughead mientras volvía a concentrarse en su lectura.

Jughead, ¿por qué no te animas?- preguntó Alice. El juego sonaba divertido.

Porque este libro es muy interesante y al final acabaré enterrado entre la nieve- contestó Jughead pensando en lo que ocurrió el año pasado.

Juggy es un aburrido, pero Al, ¿jugarás conmigo?- preguntó Jellybean, temerosa de que Alice cambiara de opinión al ver que su hermano no jugaba.

Tranquila Jelly, a mi me encantan las peleas de bolas de nieve- aseguró Alice subiendo a su escoba.

¡Buena suerte profe!- gritó Jughead al ver a las dos en el aire.