Wasp: Otras Tierras. Libro #1 (RESUBIDA)

21

Las puertas al infierno.

-Que se supone que es esto -dijo Helen mirando el gran agujero frente a nosotros.

-El infierno -se escucho decir a Alan por el auricular.

-Alan por dios, no es el infierno -hablo Andrew.

-Si bueno y como explicarían la gran ola de calor que sale de él.

-No sabemos lo que es, nadie ha estado en el infierno -miramos a Carol -Oh si -quiso sonar preocupada pero no lo logro y yo la mire.

-No claro que no, nadie ha estado en el infierno -Oliver se metió a la charla.

-Yo conozco a alguien que ha estado en el infierno -todos me miraron.

-No, la ultima vez salimos peleados -mire a Carol.

-Tal vez yo le hice una visita rápida antes de llegar aquí -dije rápido y algo nerviosa oprimí el auricular en mi oído para hablar. -Alan iré para allá necesito uno de tus lindos portales -tome mi motocicleta. -Ya los veo -me puse camino al hangar.

Iba lo más rápido posible para llegar al lugar, si Alan estaba en lo correcto y esa gran ola de calor salía de ahí era porque significaba una sola cosa, no paraba de pensar en lo que Carol me había dicho, si, la última vez que trabaje con el salió algo mal, pero él es alguien distante y el cual trabaja solo, pero lo necesitábamos.

Llegue al hangar, baje de la motocicleta, entre corriendo al lugar, los que estaban ahí me miraron.

-Necesito que abras una brecha a Londres de tierra 58 exactamente a Castle Combe -le dije a Alan mientras me acercaba a los monitores, y si, como lo dijo una gran ola de calor salía de ese enorme hoyo.

-No puedes ir tu sola a tierra 58, Alekar está ahí -me dijo Melina.

-Recuerda que no puede rastrearme, pero espero que esto sea fácil.

-De todas formas no puedes ir sola -mire a Alan. -Tengo que ir contigo para traerte de vuelta -yo solté un suspiro.

-En verdad necesito ir yo sola.

-Está bien, tengo algo, no sé si funcione, no lo he probado -me da una cajita, yo la abrí. -Con este podrás cruzar de vuelta cuando lo necesites, solo extiendes tu mano, oprimes el centro y la brecha se abrirá.

-Gracias -le di un abrazo.

-Pero si no regresas aquí en menos de tres horas iré por ti -yo asentí.

-Pero antes -corrí a cambiarme. -Listo -todos me miraron.

-Me sigo preguntando cómo es que haces eso tan rápido -me miro Melina.

Alan puso unas coordenadas para abrir la brecha, cuando lo hizo yo los mire.

-Ya vuelvo.

-Ruby cuidado -mire a Melina y le sonreí para luego pasar aquella brecha.

Aparecí en un bosque, estaba obscuro, solo se podía ver pequeños rayos de luz los cuales eran de la luna llena que estaba ese día, camine entre los arboles hasta ver un enorme roble.

-Es aquí -dije bajo para luego seguir caminando.

Llegue a una gran mansión, antigua, subí las escaleras hasta la puerta principal, mire a un costado y vi la llave.

-Tienes que guardar mejor esto -la tome y abrí la puerta. -Jon -lo llame mientras entraba a esa gran casa.

Se escucho un ruido que provenía del piso de arriba, rodé mis ojos y subí las escaleras, camine por el pasillo hasta el fondo, el ruido se iba intensificando, gritos se empezaban a oír, tome el pomo, lo gire y abrió la puerta.