Intentando Huir

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Mei veía como Raito se acercaba lentamente a ella, sintió un escalofrio al verlo tan cerca de ella, tenía ganas de salir huyendo pero entonces vió cuando se detuvo.

-Nosotros los Sakamaki, tenemos unos secretitos Koneko-chan-. ¿Secretos? ¿A que se refería?

Lo miró esperando una respuesta pero no la obtuvo, entonces volteó su rostro a la única persona que sabría que le diría.Yui vió como la azabache ponía su mirada fija en ella, tragó duro estaba muy nerviosa no sabía como lo tomaría Mei.

-No me interesa sus secretos, solo voy a estar una noche-. Mei tenía una actitud despreocupada, verdaderanmente no le importaba "esos secretos" Solo estaría una noche y ya.

Raito rió sonoramente, vaya esa chiquilla era una ingenua si creí que iban a dejarla irse. No podía concentrarse, ese olor a sangre lo volvía loco aparte tambíen estaba ese cuerpo un poco más desarollado que el de Yui que pedía a gritos que lo clamará como suyo.

-Verás Koneko-chan, problamente no te dejemos ir-. Sonrió con picardía

La azabache lo miró confundida, volteó su vista y todos los demás hermanos la miraban fijamente y Yui tenía la cabeza baja por lo tanto no pudo ver su expresión.Iba a responderle de manera incrédula pero una voz los interrumpió

-Venga a cenar-. Era el tal Reiji que los había llamado a cenar

Todos salieron de la sala principal y se dirigieron al comedor, todo se veía tan delicioso sin contar con el olor que llegaba hacía sus fosal nasales.

Mei veía cada uno de los platilos colocados en la mesa, nunca en su vida había visto tanta comida junta, todo estaba tan bien colocado.Todos los hermanos y Yui se sentaron en sus respectivos asientos, ya no había más puestos y aún faltaba Mei.

-Espera a que uno de nosotros termine-. Mencionó el azabache

Yui no estuvo deacuerdo con lo que dijo Reiji pero al final tuvo que aceptar, aveces veía a Mei que estaba sentada en el suelo de forma india y sus brazos cruzados mientras veía a Reiji seriamente, este lo único que hacía era comer muy despacio y decirle a Yui no comiera tan rápido sino se ahogaría con comida.

-¿No puedo comer en el piso?-.No fue una pregunta más bien un berrinche, eso le causo risa a Yui que veía como Mei hacía muecas por el hambre.

-Eso sería asqueroso-. Fue la respuesta de Reiji

Mei se levantó del piso, caminó hacía ellos y golpeó la mesa con sus dos puños haciendo que todos la volteran a ver.

-¡Pero tengo hambre!-. Contraatacó la azabache

-Te esperas a que algui..-.No pudo terminar porque fue interrumpido por el ruido de un silla cayendose.

-Ya termine-. Dijo Subaru, quién recogía su plato que estaba a la mitad

-No has terminado todo, Subaru-. Esta vez fue Kanato quién habló

-Ya estoy lleno-. Y con eso se retiró del lugar, dejando a todos confundidos Subaru no era de las personas que dejaban sobros de comida o decía que estaba lleno cuando aún tenía la mitad de la comida en el plato.

A Mei no pareció importarle y se sentó en el espacio vació mientras comía su chuleta acompañada con unas verduras

Cuando terminó de comer ya todos los hermanos se había ido, solo quedaba ella y Yui que la miraba fijamente. Se levantó satisfecha nunca se había sentido su estómago tan lleno.

-Estuvo delicioso-.Dijo sonriente

-Me alegro que te gustara Mei-.

Mei puso su mirada fija en la nerviosa de Yui como si quisiera descubrir su secreto, bueno eso quería aún tenía la duda de lo que había dicho Raito.

♥Atrapado por tu amor♥ [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora