Lejos de ti|Hiccstrid

Todo se acaba

Hipo

Estaba agotado mentalmente, asi que rápidamente me quede dormido,estaba tan concentrado en que el no entrara en mi mente de nuevo que simplemente me vencí.
Cuando desperté estaba en el camarote principal, aún no entendía porque el me trababa asi, pero en este momento no iba a quejarme.

Salí del camarote buscando aún no se que, mire un poco hacia los lados y estábamos en medio del mar, sonreí en lo bajo pues estábamos lejos, ella estaría bien.

—Ya despertó su alteza—dijo una voz burlona atrás mío

Gire lento, una parte de mi cabeza conocía esa voz y al verlo de frente lo confirmé, aún no recordaba su nombre pero sabía en mis afondos que no nos llevábamos bien.

No dije nada, recordé como era mi carácter cuando me enojaba, a ella no le hubiera gustado que peleara.

—¿Que? ¿No vas a responderme?, o acaso ya te volviste blando—en ese momento los demás vikingos del barco comenzaron a juntarse

—Déjalo Badia, apenas está acostumbrándose a su verdadero hogar—dijo Drago saliendo de entre medio

—¿Dormiste bien hijo?—ahora de solo escuchar esas palabras me dio asco

—No soy tu hijo—dije sin mirarlo y todos comenzaron a murmurar

Note el enojo en sus brazos pues se tensó de inmediato, si algo tenía todo esto que había pasado es que me había vuelto muy observador, creo que sabía de lejos el estado de ánimo de las personas.

—Tranquilo hijo ya te darás cuenta que aquí es donde puedes ser tu, no se que te hizo Estoico—esto último lo dijo acercándose a mi, iba a tomarme del brazo como un gesto cariñoso
Pero rápidamente me quite

—No hables así de mi padre—sentí raro decirlo, en este corto tiempo que volví con el habían sido pocas las veces que estaba con el , y aún menos las que lo llamaba padre, pero el escucharlo en mi cabeza mientras lo decía lo hacía real, a mi cabeza vinieron lo que son aparentemente recuerdos de mi niñez, en algunos como eran de esperarse estaba Astrid ahí, y en otros éramos el y yo pescando en el río.
Tenía un sentimiento nuevo en mi cabeza, al parecer comenzaba a anhelar esos momentos, querer ser Niño, sentirme protegido.
Estaba solo.

—Responde idiota—Dijo Badia empujándome, lo cual encendió una llama en mi, con un movimiento rápido lo tome del brazo y lo sometí en el suelo, sin pensarlo ya estaba colorándolo una y otra ves, ya estaba sin moverse era como un saco sin vida,
Al darme cuenta me asuste y me aleje horrorizado.
No podía pararme en el momento, me sentía vivo
Pero ahora estaba avergonzado
Mi cabeza estaba en un gran conflicto

—Te lo dije—dijo Drago acercándose por atrás mío—aún me perteneces

El se dio vuelta y me miró, hizo un ademán para lo siguiera, dude por un momento pero decidí avanzar hacia el.

Astrid.

Como era posible que cada momento todo se pusiera aún peor, fueron pocos momentos en los que sentí verdadera felicidad cuando hablé de mis sentimientos con Hipo, por fin era libre y lo sabía pero ahora estaba sola, me sentí como si una parte de mi se hubiera ido,
O solamente descubrí que nunca había estado ahí.
Quiero decir nunca estuve completa y ahora me di cuenta de eso, porque estoy lista para eso.

Necesitaba un plan.

Una voz me saco de mis pensamientos, era Patapez

—Astrid te están buscando en el muelle—su mirada era esperanzadora
Asi que corrí lo más rápido que pude, no había salido del gran salón en dos dias intentando averiguar a donde se habían llevado a Hipo, así que salir y ver la luz era un poco raro para mi.
En lo que mis ojos se acostumbrarán al brillo, pude ver a lo lejos una cara conocida.