Entre Destinos y Silencios

Llegando al Pueblo

Bajaron por el camino acompañados por una briza y un calor abrigador, Declan tenía unos jeans ajustados y entubados como le gustaban, con una camisa azul que se perdía con el color de sus ojos; llevaba de gancho a Roulsh y en la otra mano un saco para las horas de la tarde.

Cuando llegaron al pueblo, Declan le invito un helado a Roulsh y se dio cuenta que les había rendido, eran un poco más de las doce y se preguntaron si Steve estaría desocupado. El pueblo era muy lindo, algo bohemio, caminaron un poco más siguiendo las instrucción que le habían dado un habitante del lugar para llegar al muelle, el lugar estaba muy decorado, tenían una tarima grande y buenos adornos; al rato de observar como quedaba el lugar, alguien los asusto.

- buh! - dijo Steve, que agarro por detrás a Declan y a Roulsh

- nos asustaste - dijo Roulsh cogiéndose el pecho

- hola chicos han llegado temprano, pero ya casi estoy listo, ¿ya comieron? - dijo Steve

- no, no hemos comido, nos vas a invitar - dijo Declan

- claro, en el restaurant de mi madre - dijo Steve caminado hacia el muelle

- eso es trampa, eso no es una invitación, tu madre te invita a ti - dijo Roulsh cruzándose de brazos.

Cuando Steve vio más de cerca lo linda que estaba y lo simpática que se ponía, haciéndose la indignada, no pudo contener las ganas de decírselo, pero al tiempo vio a Declan parado junto a ella haciendo una cara de "no te atrevas", por lo que Steve tuvo que contenerse en ese momento.

- jefe, jefe, ¡hay un problema! - dijo un chico que llegaba corriendo.

- ¿jefe?- dijo Roulsh al tiempo que Steve alzaba los hombros.

- que pasa, ya está casi todo listo - dijo Steve muy serio, incluso dio la impresión de que realmente era el que mandaba allí.

- Nyla, está furiosa porque no tiene violín - dijo aquel chico

- ¿porque?, ¿cómo así? - Steve se puso furioso y salió del lugar directo a lo que parecía un salón, incluso Declan no lo podía creer, el control que tenía sobre el lugar era grande. Cuando Steve se dio cuenta que los había dejado solos, le dijo algo al chico.

- el jefe, dijo que si quieren pueden ir con él, que no se demora -

- está bien - dijo Declan mientras seguían al chico.

Cuando entraron al lugar, era un almacén de instrumentos y a lo lejos se oía una fuerte discusión.

-¡pero como me vas a decir que no hay más! -

- pero es así, Nyla, tu no tenías un violín? -

- se me daño y ¿el del año pasado?-

- no ese está mal desecho, porque no me avisaste con tiempo, no puedo hacer nada, no sé de donde lo voy a sacar -

- pero Steve, que rayos pasa!!!, tu eres el encargado y ¿no me vas a solucionar esto?-

Poco a poco Roulsh y Declan se acercaron más, pero les dio pena importunar, así que se iban a devolver cuando...

- He chicos... - dijo Steve

- qué pena no queremos molestar - dijo Roulsh con vergüenza

- no molestan, ya me iba - dijo la chica dándoles la espalda, con un tono de bastante furia