Entre Destinos y Silencios

Unas Notas

Al día siguiente, después del memorable encuentro Declan, quería volver a ver a Nyla, pero no sabía que escusa dar, así que simplemente se paró y fue a preguntarle a su Padre si lo podía ayudar en el almacén, él se encontraba en el taller de la casa ya dispuesto a arreglar el violín de Nyla.

- hola padre, ¿deseas que abra el alancen hoy? - dijo Declan

- no hijo, hoy el pueblo no trabaja - dijo Cristofer muy concentrado

- ¿Cómo así? -

- sí, hoy es el día de descanso, la gente va a nadar o hacer otro tipo de cosas, incluso Abigail no abre, por lo que nos invitó a desayunar - dijo Cristofer buscando herramientas

- y ¿mi mamá? - dijo Declan

- esta con Roulsh y Ana haciendo cosas... de mujeres supongo, tu entiendes - dijo su padre al tiempo que decía - listo todo, solo es volver y trabajar -

- ¿estará listo para hoy? - pregunto Declan emocionado

- Creo que, es posible que me demore todo el día, pero tu madre me va ayudar y Liam está interesado en aprender por lo que creo que para mañana en la mañana estará listo ¿Por qué? - dijo Cristofer

- es que la presentación es pasado mañana y supongo que ella querrá practicar - dijo Declan

- si claro, la presentación es antes de los juegos pirotécnicos - dijo Cristofer al tiempo que se apoyaba en la mesa - oye hijo no te gustaría hacer una presentación, he escuchado que has mejorado demasiado -

- pues la verdad si me gustaría, pero no se, creó que sería difícil - dijo Declan pensando en la opción.

- pues si quieres déjame hablar con Bernard, ¿te parece?, al fin y al cabo él es el encargado de los tiempos - dijo Cristofer

- si claro está bien - dijo Declan

- porque más bien no vas a alistarte, ya nos vamos - dijo Cristofer.

- está bien padre -

Declan subió se arregló y se dispuso a salir con su familia; cuando llegaron a la casa de sus tíos, Steve le dijo a Declan y a Roulsh que fueran a una cueva que queda a las orillas del rio, bajando por la casa de Samantha

- si claro, invita a Nyla - dijo Roulsh, en complicidad con Steve

- yo quiero ir - dijo Bryan en un sonido de llanto

- no hijo, creo que es un plan de cuatro - dijo Bernard

- ¿de cuatro?- dijo Liam - Declan aun así te encargo a mi sobrina - susurro Liam

- si señor- dijo él

- vamos que dices, dame el número y la llamamos - dijo Steve con el celular en la mano

- porque no se preocupan por desayunar primero y luego si hacen sus llamadas - dijo Abigail mirando fijamente a Steve.

- si mamá - dijo Steve mientras guardaba el celular.

Cuando terminaron Cristofer se despidió pidiendo disculpas pues no podía quedarse más, debía hacer un trabajo (arreglar el violín de Nyla) salió de la casa con Samantha, Ana y Liam, dando las gracias por tan buena comida.

- que dices Declan ¿la invitas? - dijo Steve mientras salían también de la casa

- no..., o bueno préstame tu auto y te aviso más tarde ¿a qué hora estaremos allí? - Dijo Declan

- ¿mi auto?, el auto de mi papá - lo corrigió Steve - ¿la vas a recoger? -

- sí... no... bueno, tal vez... es complicado, ¿me lo prestas? - dijo Declan

- si claro- dijo mientras le daba las llaves - en realidad vamos un poco tarde porque entre Roulsh y yo haremos unos Sándwich -

- Ok, eso me da tiempo suficiente para...- dejo a medio concluir mientras encendía el auto.

Steve y Roulsh se miraron sin comprender nada - ¡pero procura llegar a la una!- le grito Roulsh

- está bien - dijo Declan sacando la mano de auto mientras se ponía en marcha.

Cuando Declan llego a las afueras de la posada Black Swam, saco un papel y un esfero de la guantera, no sabía que escribir, pero aun así lo intento, con algo de vergüenza por su letra, pues no era la mejor del mundo.

Sila

¿Cómo estás? Espero te encuentres mejor, te cuento que tu violín estará listo para mañana, espero que no sea muy tarde... si necesitas practicar te puedo prestar un violín del almacén.

Pero, la razón principal de esta nota es una invitación, sé que me dijiste que no saldrías conmigo, pero yo tampoco te dije que dejaría de insistir, por lo que quisiera que nos acompañaras, a mi primo y a una amiga, a una salida, es una cueva que queda al lado de la orilla del mar, frente al faro Neck, estaremos allí por ahí a las dos de la tarde, por favor no faltes.

Quien te piensa y extraña

Tharsten

Declan no se atrevía a salir del auto, pues le parecía muy extraño hacer este tipo de cosas, pero pensó si Nyla va, todo valdrá la pena; así que salió del auto y se dirigió con sigilo a la posada Black Swam

- Buenos días - Declan no tenía ni idea de cómo preguntar, pero aun así lo hizo - disculpa es para dejar un mensaje -

- ¿señor Tharsten? Si mire aquí tiene uno para usted - dijo la recepcionista.

- ¿para mí? - pregunto Declan

- si para usted, ¿es usted el señor Tharsten? Verdad -

- si así es... - lo tomo pues se dio cuenta que Nyla también había estado pensando en él.

- me decía que también traía un mensaje?... -

- si así es, he... mire es para la señorita Sila, por favor espere a que ella pregunte por él, está bien - dijo Declan como si fuera un espía.

- si así es, ella ya me explico todo -

- disculpe ¿cómo sabía que era yo? - pregunto Declan

- porque ella me lo describió con lujo de detalle, haciendo énfasis en lo fuerte y simpático que es usted - dijo la recepcionista guiñándole un ojo - además ya nadie hace esto, para eso existen los celulares -

- claro, claro - dijo Declan sonrojado por el guiño de la recepcionista y con algo de ego por lo que le había dicho Nyla - muchas gracias -

Declan salió de la posada con el sobre en la mano, se subió en el auto y lo abrió, la letra era realmente hermosa, por lo que sintió pena por la suya.

Tharsten

Gracias por todo en verdad me diste un respiro en la vida que me toco

Con cariño Sila

Psd: me encanto hablar contigo...

No era más, el voltio el sobre, busco y busco pero no encontró nada ¿solo decía eso? Se sintió algo decepcionado pero aun así se respondía, que más le podía decir, que otra cosa quería que dijera si solo habían hablado un rato. Se sentó en el sillón del auto y decidió esperar por ella, pero ella no llegaba, hasta que se dio cuenta que ya casi era la hora, por eso decidió irse, comprendiendo que ella no lo acompañaría.