Amor, no enfermedad

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Advertencia Contenido +18
Lean bajo su responsabilidad, disfruten del capítulo ;)

Perdió la noción del tiempo, se dio cuenta de que la tarde había pasado porque por las ventanas apenas se veía claridad.

Y ahí se encontraba él, no sabía cuanto llevaba, pero ya casi terminaba, las botellas vacías las lavaba y guardaba, sin embargo, escucho pasos bajar por la escalera.

—Se puede saber ¿Qué demonios estás haciendo? —pregunto la voz del azabache que provenía de la entrada de la cocina.

A Jarvis le recorrió un escalofrío al oír esa voz, pero no iba a retroceder.

—Toco la sexta sinfonía de Beethoven. —dijo con un claro tono sarcástico mientras seguía vaciando las botellas.

 Sintió como el menor se acercaba a él y lo tomaba de la muñeca, él al instante soltó la botella para encararlo.

—Muy gracioso señor comediante, deja eso de una vez, no es parte de tu trabajo. —menciono con un tono de enojo el pelinegro.

—Tampoco ir a buscarlo a ese lugar de mala muerte y aun así lo hice. —respondió a la defensiva.

—Nadie te pidió ir si tanto odias ese lugar. —no media sus palabras por alguna razón se sentía atacado por el mayor.

Edwin ante esa declaración le hirvió la sangre.

—¡Tony me llamo! Porque estaba preocupado por ti, ya que no llegaste anoche —estaba más cerca del pelinegro. —Fui corriendo porque Tony supo lo que estaba pasando en StoneWall, ¡Arrestaron a 13 personas, Howard! —le recrimino enfadado. —Estuve más de una hora buscándote, golpee a un jodido policía porque ese maldito idiota te estaba intentando sacar la ropa 

El azabache se quedó con las palabras en la boca ¿Qué podía decir? La cabeza le dolía y su garganta se le formó un nudo.

—Tu trabajo es cuidar de Tony no de mí, Jarvis.

—Entonces deja de comportarte como un niño, Howard. 

El ojioscuro lo miro con enojo, quería llorar, no necesitaba a Jarvis para que le dijera lo que debía o no hacer ¡Él era el jodido Howard Stark! Si él quería beber o ir de fiestas lo haría, esa era la única manera que había encontrado para despejar su mente y callar sus pensamientos, el alcohol para él se había vuelto una manera de olvidar lo fracasado y estúpido que se sentía, lo enfermo y anormal que era, por su maldita enfermedad su exesposa odiaba a Tony y era la misma razón por la que a veces era hiriente con Jarvis, no quería enfermarlo.

—Tú no entiendes ni una mierda, que no te importe lo que haga, es mi asunto. —grito mientras se daba la vuelta y se disponía a salir.

Edwin al instante lo siguió y lo tomo de la muñeca para evitar que se fuera.

—Si me importa Howard, me importa y mucho ¿Crees que es fácil para Tony ver como te destruyes? ¿Crees que es fácil para mí? —pregunto con molestia el peliclaro mientras veía como el más bajo le huía de la mirada.

—¿Por qué mierda te importa? Solo soy tu maldito jefe no tenemos una relación más allá de eso. —en sus palabras se notaba la rabia pero también la tristeza.

El ojiverde ante esa declaración se hartó, agarro al magnate y lo acorralo con la pared más cercana.

—Me importa porque te quiero Howard —sus lágrimas salieron sin control alguno. —¿Tan difícil es entender eso? ¿Tan difícil es que entiendas que si algo te pasa me muero? —lloro amargamente mientras llevaba sus manos a su cara.

Ángel [Jaward AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora