Capítulo 1 - Introducción Familiar

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Londres, Inglaterra

Todo comenzó cuando yo tenía 3 años y mis papas se divorciaron, yo solo era una niña, ni siquiera sabia que estaba pasando o el por qué, lo único que sabía era que mi papá estaba dejando a mi mamá, a mi hermano de 8 años y a mí; todo por una mujer.

Hola, mi nombre es Luisana Baldassari, actualmente tengo 18 años y soy una asesina. Sé que tal ves se están preguntando por qué lo hago pero les puedo asegurar que tengo una muy buena razón. Para eso, retrocederemos 1 año.

Pero antes que nada, les presentare a mi familia. Mi madre Marian Baldassari, ella nació en Italia donde conoció a mi papá y se embarazo cuando ella tenia solo 15 años. Al paso de los años se mudaron aquí, a Londres y después vino al mundo mi hermano mayor, Noah Baldassari de 23 años, el nació aquí en Londres y actualmente es uno de mis mejores amigos.

Era como alguna otra mañana para nosotros cuando mi madre nos habló para desayunar. Noah, como siempre, fue el primero en llegar.

Buenos días hermosa, ¿cómo amaneció la mujer mas maravillosa del mundo?

— Qué imbécil. Hola mami

—¡Esa boca!

—Entonces, ¿alguna novedad mama? Sobre ya sabes que

—Mamá, ¿qué cosa? ¿De qué esta hablando este idiota?

¿Podrían callarse antes de que les cosa la boca? El esta hablando del papeleo de los restaurantes —sinceramente no podia creer que en realidad estaba pensando en hacer eso— Entonces si vas a tratar de recuperarlos después de todo lo que ha pasado— Mi amor, es algo que tengo que hacer. Esos restaurantes son míos, tu abuelo me los heredo, no puedo perderlos

En realidad me lastimaba ver a mi madre llorar por todo lo que mi padre biológico la estaba haciendo pasar, no saben cuánto odio sentía hacia él, ni siquiera podia escuchar o decir su nombre. Yo sé que mi madre se sentía mal por el hecho de pensar que yo no la iba a apoyar pero la verdad era que si lo haría. Lo único que yo no quería era que mi mama terminara decepcionada al final. Al menos, tenía a Bram Hagen, su esposo y mi padrastro. Han estado casados por 10 años.

él era el padre que siempre había querido, siempre apoyando las ideas de mi hermano y las mias, el estuvo ahi cuando me rompieron el corazón por primera vez, no podia pedir más. Después de todo, yo era feliz.

Decidí irme a la sala, no quería que mi mama viera mi cara desencajada, no podia creer que ella quería verlo, porque eso es lo que pasaría, ella volvería a verlo.

Seguí hablando conmigo misma, sin dejar que alguna palabra saliera de mi boca, cuando de repente sentí alguien detrás de mí. Voltee y ahi estaba Bram, sus ojos fijos en mí preguntándose el por qué me encontraba ahi sola y quizás perdida en mis pensamientos, así que él rompió el silencio.

¿Te encuentras bien, Luigi?

Cada vez que él me llamaba por ese apodo me daban escalofríos, la primera vez que el me conoció se enamoro completamente de mí y desde entonces no deja de llamarme así, que sinceramente no creo que en algún momento pare.

Lo siento Bram, creo que no lo estoy. Llamaré a Lissy para invitarla a casa. —mi mejor amiga— Entiendo, sabes que puedes hablar conmigo ¿verdad? —su voz hacia mi siempre era tan cálida, como si el supiera que yo no estaba bien, él era mi padre después de todo, él me conocía muy bien— ¿Puedo preguntarte algo?

Una vez salida esa pregunta de mi boca, lo vi fruncir el ceño, como si estuviera tratando de leerme o descifrarme.

Ya se cual es tu pregunta y antes de que comiences a gritarme, yo le dije que estaba haciendo lo correcto. Esos restaurantes pertenecen a tu madre.

Supongo que nunca se ocultaban nada.

Por otro lado, estaba mi hermano Noah. Èl era el chico perfecto, el que toda mujer soñaba tener. Él era una persona muy humilde, amable, atento y todos los adjetivos positivos que existan. Siempre se la pasaba metido trabajando en su oficina o con su novia, Leilani.

¿Esto es todo? —dijo Noah mientras se cruzaba de brazos, mirando fijamente al hombre que tenia frente a él, de una manera muy sarcástica— Lo siento, esto es todo que pude conseguir pero sí me da una semana más, le prometo que traeré el resto —dijo de una manera un poco asustado— ¿Crees que soy de las personas que dan más tiempo a los que no tienen palabra? —arqueando su ceja y cruzándose de brazos— Por favor, esta es la primera vez que me atraso en un pago, siempre he sido puntual —en efecto, esa era la primera vez— En ese caso, no te daré nada hasta que termines tu deuda —Noah se dio la vuelta dirigiéndose hacia un ventanal y dejándolo parado en medio de la oficina—

Hecho, muchas gracias.

Mi madre nunca va a ganar, ella no sabe en lo que nuestro padre biológico esta metido, ni tampoco que es lo que yo hago. No quisiera que nadie de mi familia se involucrara en esto, no me lo perdonaría —Noah se dijo a sí mismo mientras se frotaba la frente y procediendo a encender un cigarro.

Continuara...

ELLA, el REYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora