Burning Love [911- Evan Buckley]

6

Narra Buck.

Annie no mentía cuando dijo que ella era la única familia de Dylan, ya que en su entierro, solo estábamos el equipo, Athena, Abby, la casera del piso en el que vivía Annie, una mujer y hombre más que según tenía entendido, eran el médico y enfermera del chico durante su estadía en el hospital.

Mi mirada se mantiene en la chica.

Ella está con su mirada fija en la foto de su pareja fallecida, hay lágrimas cayendo de su mejilla.

Había pasado toda la semana con ella y el tiempo que he estado trabajando su casera le hacía visitas y me mantenía informada cada momento.

— Ahora, la pareja de  Dylan quería decir unas palabras— dice el cura.

Ella se levanta temerosa y coloca junto al ataúd cerrado que pronto sería incinerado.

— Yo... Me he pasado toda la noche pensando que decir— saca un papel de su chaqueta— No quería olvidar nada importante, así que lo he escrito— su voz  a temblar— Conocí a Dylan....

Yo me acerco a ella cuando noto como su cuerpo empieza a temblar y no duda en abrazarme.

Permite que coja el papel en sus manos para que pueda leerlo.

— Conocí a Dylan con quince años, después de que intentase quitarme la vida— empiezo a leer con ella aún abrazada a mí— Como era menor y no tenía padres me llevaron a la que sería mi última casa de acogida, ambos éramos y somos tal para cuál, como si hubiéramos sido creados por el mismo patrón, cuando cumplimos la mayoría de edad, ambos empezamos esa aventura que es independizarse, aunque teniendo en cuenta las veces que nos habíamos mudado de casas de acogida, él cuatro, yo tres, el independizarnos no daba miedo, él me dió la fuerza para cumplir ese sueño que era entrar en los bomberos y yo le convencí para que entrase a estudiar ingeniería automovilística, como siempre había querido.— hago una pausa para mirar a la chica que sigue abrazada a mi pero con su mirada en la foto del chico— Dylan me enseñó el verdadero significado de guerrero porque incluso en sus peores días de enfermedad, él tenía una sonrisa que iluminaba el día, no voy a alargar mucho esto porque todo lo que se me ocurre siento que son cosas personales nuestras, así terminaré con su frase favorita de su película favorita " La muerte no es el final, es más un punto de partida."

[...(^^)...]

Narra Annie

Abro la puerta del apartamento con nerviosismo.

Sé que Buck y Abby me acompañan y sé que están confusos porque no es mi apartamento habitual

— Es nuestro apartamento— explico cogiendo un marco con la foto de nuestra primera cita— Aquí nos mudamos cuando nos independizamos, cuando él entró en el hospital, yo preferí alejarme de aquí pero él me dijo que continuas con mi vida y creo que volver aquí, redecorar un poco, puede ser un buen inicio.

— Y estamos aquí para ayudarte en lo que quieras— dice Buck, Abby asiente a lo que dice.

Ellos empiezan a mover las cosas del lugar según les voy indicando y las cosas de él, como ropa y libros, son guardadas en cajas que pronto serían donadas.

Me siento bien cuando mi cuerpo toca sofá, cambiado de sitio, observando el álbum de aventuras que el chico hizo copiando la película de Up.

— ¿Estás segura de que quieres quedarte sola?— me pregunta Buck colocándose su chaqueta

— Voy a estar bien, Buck, lo prometo.— le abrazo

— Puedes llamarme cuando quieras, vendré aquí rápidamente.

— No va a hacer falta, estoy bien.

— ¿Quieres que nos llevemos las cajas?— pregunta Abby.

— Mañana tengo el día libre, puedo ir a llevarlas— digo antes de abrazarle— Gracias por la ayuda, chicos.

Ellos me ofrecen una última sonrisa antes de irse

[...(^^)...]

Narra Buck

— ¿Por qué estás conmigo?— me pregunta Abby, yo le miró extrañado

— Es una pregunta rara después de tener sexo— ella ríe— Estoy contigo porque eres una mujer maravillosa, conectamos por teléfono y en persona hemos conectado aún más.

— Pero no soy tu persona— esas palabras me extrañan más— Buck, estos días que he convivido contigo y con Annie, lo he visto, ambos sois uno para el otro, lo único que os frenaba era el pobre chico, que descanse en paz, se que no está bien decir esto hoy, pero no desaproveches esta oportunidad conmigo, Buck.

— Abby...

— Podemos intentar esto, Buck, pero en algún punto, acabareis juntos.— Yo suspiro— Sabes que tengo razón.

— Mierda, Abby, sí, la tienes— me siento en la cama apoyando mi espalda en la pared— Annie se ha convertido en una de esas personas en mi vida a quién no quiero perder, pero tú también lo eres.

— Podemos ser amigos, no es ningun problema para mí y, si quieres, hasta que todo se vuelva formal, no es ningún problema hacer esto más a menudo— nos señala provocando mi risa

[...(^^)...]

Narra Annie.

Camino por el apartamento con una botella de Jack Daniel's en mi mano.

La favorita de Dylan.

Bebo el último trago de golpe antes de sentarme en nuestra cama.

— Nunca te ha gustado cuando me tomaba un trago y ahora te has bebido la botella entera.

— Wao, si que estoy borracha— digo al ver la figura del chico en la puerta

— Demasiado— ambos reímos— Veo que has hecho una buena reforma

— Aún faltan cosas, voy a comprar ese cuadro que nunca me dejastes comprar

— Me parece justo— sonríe— Hazme un favor, Annie, si quieres llorame unas semanas pero después, ve a por Buck— le miro extrañada— Me prometiste que continuarías con tu vida, Belle, ya has comenzado, estoy orgulloso de tí, pero él, podría ser tu siguiente paso

— Unas semanas para llorarte me vienen bien primero.— él sonríe con esa sonrisa que me enamoró—  Gracias por todo el tiempo que has estado conmigo.

— Siempre estaré contigo

— ¿Te quedas conmigo hasta que me duerma?

Él se tumba en la cama y yo me abrazo a él quedándome plácidamente dormida

[...(^^)...]

A la mañana siguiente...

El dolor de cabeza viene rápido en cuanto abro los ojos.

Agradezco que sea mi día libre, porque la botella de Jack Daniel's no fue buena idea.

Miro mi teléfono encontrando un mensaje en él.

"Buenos días, Annie.
Simplemente quiero decirte que salgo temprano hoy de trabajar, si te encuentras con ánimos, podemos ir a dar un paseo." - Buck

Yo levanto la vista un segundo, observando la foto en la mesita de noche con un suspiro antes de contestar una respuesta afirmativa.

Se lo prometí, es hora de continuar.