𝗠𝗜 𝗠𝗘𝗗𝗜𝗢 𝗕𝗔𝗟𝗢́𝗡 ❱ Capitán Tsubasa ✔

I. 𝐄𝐋 𝐁𝐀𝐋𝐎́𝐍 𝐄𝐒 𝐌𝐈 𝐀𝐌𝐈𝐆𝐎

TSUBASA'S POV

Puedo resumir mis doce años de vida en una sola palabra: fútbol.

Sí, el fútbol formó gran parte de mi vida. Mejor dicho: el fútbol es vida.

Estoy seguro de que ustedes se preguntarán: ¿por qué amas tanto el fútbol? A lo que yo responderé con un hecho que me marcó a mí y a mis padres. 

Cuando tenía un año, casi fui arrollado por un camión.

Todo ocurrió cuando yo aún vivía en la ciudad de Tokio (recientemente me mudé a Nankatsu, en Shizuoka). Mis padres y yo estábamos de paseo por la ciudad, yo estaba jugando con mi balón de fútbol (ya con un año podía patear bastante fuerte, jaja), mientras mis padres bajaban unas maletas de un taxi. Entonces llegó un momento en el que, jugando, me fui a la calle... Y nunca entendí por qué me desaparecía de esa forma, teniendo tan sólo un año. 

En fin, el punto es que mis padres me buscaban desesperadamente. Pues es obvio que era peligroso que yo estuviera solo en la calle. Entonces oyeron la bocina de un camión, e inmediatamente corrieron a donde yo estaba, pero el camión venía rápidamente hacia mí...

─¡TSUBASAAAAAA!─ gritó mi padre.

Yo no me moví ni un centímetro. Sólo observaba el camión acercándose cada vez más a mí. 

Y antes de seguir quiero aclarar algo: yo considero al balón como a mi mejor amigo, y también como a un héroe. En ese momento en el que parecía que mi corta vida iba a terminar, sucedió el milagro:

El balón, el cual sostenía en mis manos, absorbió el impacto del camión (que hizo lo que pudo por frenar), y me hizo volar y caer a salvo en el jardín que había del otro lado de la calle. Mi padre fue rápidamente por mí. Me cargó de abajo de las axilas y me analizó. Yo no tenía ni un rasguño, y reía inocentemente como si no hubiera ocurrido nada.

Pero a ellos casi les da un ataque cardiaco. Mi madre se agachó y se tapó la boca del susto que se llevó, y mi papá me miraba asombrado.

Ese día me marcó por completo. Y ni siquiera sé cómo demonios recuerdo cada detalle, ¡si tan sólo tenía un año! ¡En esa época apenas podía nombrar a mis padres! Si tendré buena memoria. Pero el punto es que ese día mi balón me salvó la vida. Prácticamente lo tengo desde que nací, y está en perfectas condiciones aún, como si fuera recién comprado. El balón es como un hermano para mí.

Desde ese accidente, me he vuelto adicto al balón y al fútbol en general. Tanto que siempre que vaya a algún lugar llevo mi balón, pero no en las manos, sino dominándolo en la calle. Lo amo tanto que no lo suelto nunca.

De esa forma pude volverme hábil y tener un control perfecto del balón. La mejor manera de volverte un gran jugador es llevar ese tipo de rutina: llevar el balón a todas partes, incluso hasta al baño, jaja. De esa manera mejorarás el equilibrio, tu forma de driblar y el control. 

Aunque eso me llevó a no tener amigos nunca, o bueno... hasta que conocí a una niña en cuarto año que decía siempre que yo era muy talentoso. Cómo olvidarme de Yayoi. Pero durante casi toda mi vida no he tenido amigos. Me veían como al raro que perseguía un balón de fútbol, y se negaban a hablarme si no era para burlarse de mí.

Sin embargo, nunca necesité amigos. Es decir, no tengo problemas en tener uno, pero como dije: mi balón de fútbol siempre fue mi mejor amigo, y no me arrepiento de absolutamente nada.

─¡Tsubasa!─ me llama mi mamá─¡¿En dónde estás, hijo?! ¡Ayúdame a bajar las cosas!─ grita. Ella está bajando todo del camión de mudanza. 

Pero yo no la escucho, y salgo con mi balón.

─Iré a explorar─ le digo─. Regreso al rato, ¿sí, mamá?─ y me voy, dominando el balón, como siempre.

─¡¿Qué?! ¡No, espera! ¡Regresaaa!

Yo simplemente seguí corriendo hacia la ciudad.

─¡No me ignores, te estoy hablando!─ bufó─Cualquier excusa es buena para irse a jugar con su balón.

No me juzguen, ya sé que soy rebelde, pero es que nada en esta vida puede evitar que yo salga a disfrutar del fútbol y de estar con mi balón.

Y más porque ahora más que nunca tengo una enorme curiosidad de saber cómo será la nueva ciudad.

No sé por qué, pero presiento que en esta ciudad voy a aprender el verdadero significado de fútbol...