Capítulo 31: El cebo

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Álex

Despierto con un sabor metálico en la boca. La tengo pastosa. Abro los ojos y estoy tirado en el suelo. Hace mucho frío y está lloviendo sobre mi cuerpo. Sé que estoy desnudo sobre tierra mojada. Palpo el suelo con la mano. Imágenes de la noche vienen a mi cabeza. Hicimos el amor con Ivelina. Chris y yo. Él me dijo que la quería, hicimos el amor y luego ella se presentó ante nosotros, se desnudó y lo hicimos con ella. La cabeza me va a estallar, parece que un camión me hubiese pasado por encima. Me incorporo despacio y veo a Chris tirado delante de mí. También desnudo y con sangre en la cabeza. ¡¡¡JO.DER!!!

Me lanzo sobre él, ¿Está muerto? ¿Qué cojones? Entonces me viene otra imagen. Unos tíos nos golpearon. ¿Ivelina? Miro a mi alrededor. Ella no está. ¡Mierda!

- ¿Chris? ¿Chris? - le zarandeo, busco su pulso. Uff, respiro, menos mal que tiene pulso. Mierda. Le tapo con una camiseta como puedo.

- ¿Ive? ¿Ive? - miro a mi alrededor. Veo la ropa empapada. Me la pongo y me cuesta ponérmela. Se pega a la piel. Veo el camisón de Ive, tiene bastante sangre. ¡Oh, Dios mío! Esto no está bien. Oigo un ruido a mi espalda. Me giro y veo a Chris que abre los ojos y se toca la cabeza.

- ¡¡¡Chris!!! gracias a Dios. - me arrodillo a su lado y le beso la cara, mejillas, nariz, el cuello, la frente ... Parezco una madre tras encontrar a su hijo perdido. Entonces me acuerdo de mis hijos.

Me levanto de golpe. Le tiendo la ropa a Chris. - Levanta, tengo que ver a mis hijos. Nos han debido golpear en la cabeza. No hay rastros de Ive. No sé dónde está. Yo... - pongo las manos en la cabeza

- ¡¡¡Ve a la casa JODER!!! Yo me visto y busco a Ive. Ve a ver a tus hijos. - Noto la angustia en su tono. Acaba de coger el camisón de Ive. Mira a su alrededor. - Entremos los dos, necesitaremos ayuda. ¡Corre!

Llegamos a la casa y entramos de golpe. Nos recibe el silencio más absoluto. No oigo nada. Me dirijo a la habitación de mis hijos. Y entro, enciendo la luz y miro. Están cada uno en su camita. Me asomo y Francesco respira como si nada, boca arriba. Chris que ha entrado detrás toca la carita de Alma.

- Parece que están bien. - Se mira el reloj - solo son las tres de la mañana. ¿Sabes qué habitación tiene Blanca?

- No. Pero sé cuál es la de Dante. Vamos. - agarro a Chris de la mano y le guío.

Llegamos a la puerta y llamamos. La puerta se abre y nos recibe un Dante desnudo, y con cara de mala hostia.

- ¿Qué pasa? - lo dice enfadado. Nos mira y entonces ve el camisón ensangrentado. Abre los ojos y nos hace pasar a la habitación.

Enciende la luz y veo que Blanca se tapa con la sábana. ¿En serio se ha acostado con Dante? ¿Con un mafioso? Dante no se molesta en taparse.

- ¿Qué ha pasado? - Le quita el camisón a Chris de las manos.

- Nosotros... - me rasco la nuca.

- Estábamos los tres en el muro de fuera. Llegaron unos tipos y nos golpearon. Al despertar Ive no estaba. - Buena síntesis.

- Estabais... - Dante arquea una ceja, pero lo deja cuando ve la expresión de Chris. - ¿Cómo es posib...

Pero no termina la frase y sale como alma que lleva el diablo del cuarto. Ni siquiera se ha vestido. Miramos a Blanca que agacha la cabeza. Sale de la cama desnuda y comienza a recoger su ropa. Se oyen gritos y de repente Valdés aparece en la puerta, al ver a Blanca vistiéndose su cara torna a una sombría y con toda su mala hostia grita.

- ¿¿QUÉ ESTÁ PASADNO?? - Mira a Chris y a mí. Nos ve empapados. Entiende que algo raro pasa. Blanca termina de vestirse.

- Se han llevado a Ive. - pasa por su lado golpeando su hombro con el de ella - No es momento de que mees en las esquinas marcando territorio.

Un Amor Imposible.  (Serie Amor Libro II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora