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Ayer después de una semana pude dormir tranquila por saber que podía tener algo más de libertad. Quería salir con los hermanos o al menos saber si Loki había hablado con su padre, los encontré hablando en el pasillo y me quedé escuchando porque escuché mi nombre a parte de que Thor estaba alterado, acercándome lentamente por detrás del pelinegro.

—¡Si de verdad la amases no le harías esto! ¿A caso la llegaste a querer en algún momento? -le gritó Thor a Loki.

—¿Quieres que te diga lo que quieres oír? No, nunca lo hice -Thor abrió los ojos como platos al ver que estaba detrás escuchando-, solo actué así porque es atractiva.

—Deberías entonces decírselo a ella, ¿no? -dije, haciendo que se tensase y no se diese la vuelta por miedo-. Vamos, date la vuelta, mírame y explícamelo otra vez. 

Loki se giró con cara de miedo, yo le di una bofetada y me fui de allí corriendo con las lágrimas recorriendo mis mejillas, ignorando los chillos de los hermanos intentando hacer que volviese. No sabía a dónde ir y aún menos qué hacer, me sentía traicionada porque de verdad le amaba, y él solo se estaba aprovechando de mí. El dolor era aún más intenso comparado con el de la pérdida de mis padres, tal era el dolor que no era capaz de sentir nada a parte de ira.

(...)

Pasaron días en los que no pude de parar de llorar, al menos Thor y Frigga me visitaban de vez en cuando para intentar animarme y que comiese algo, aunque no lo consiguieron.

Llegó un momento en el cual la tristeza pasó a ser ira, la cual focalicé en mi entrenamiento. Lo encontré más útil y me ayudó a desahogarme pegarle a los novatos con los que ahora entrenaba (lo siento por ellos).

¿En cuanto a Loki? No se ha dignado en disculparse ni nada parecido, me evita por los pasillos y come a diferentes horas para que no pueda encontrarle desprevenido. ¿Y sabes qué? No le necesito, no necesito sus explicaciones porque seguramente sean mentira, por algo es el dios del engaño.

Me encontraba practicando movimientos con mi espada cuando sentí una presencia detrás mío, y al darme la vuelta en defensa a poco le corto el cuello a Thor.

—Astridr, ¿estás segura que ya estás bien? Parece que quieres matar a todos.

—Sí Thor, no voy a estar siempre triste por ser el capricho de un niño consentido. ¿Y tú que tal? Me han contado que estás viajando mucho por el bifrost.

—Bueno, Sif nos dijo que deberíamos explorar enteramente los otros reinos para poder sabernos todos los campos de batalla por si en algún momento ocurriese una guerra.

—¿Y eso os divierte? ¿Caminar durante horas?

—A veces matamos bichos.

—Sí, hormigas al caminar. Thor, ¿por qué no tomas la iniciativa y hacéis algo más interesante? No tenéis que seguir las ordenes de Sif solo porque os guste.

—Parte de razón tienes, pero es que no sabemos qué podríamos hacer.

—Y yo tampoco, ahora si no te importa quiero entrenar.

Thor suspiró frustrado por no poder ayudarme o animarme y se fue mientras yo seguía practicando movimientos de espada.

(...)

De camino a mi habitación me crucé con Loki, el cual jugueteaba con una doncella. Pareció notar mi presencia porque nuestras miradas se cruzaron por un segundo. Seguí mi camino a mi muy necesitada ducha con la cabeza bien alta hasta llegar a mi cuarto, donde cerré de un portazo y ahogué un chillo con mi almohada. Me daba rabia verle tan feliz, como si lo nuestro nunca hubiese existido.

Princess of Asgard (Fanfic de Loki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora