Acuario [Jojo's Bizarre Adventure]

10

Mis pasos me guiaron de manera rápida hacia la planta baja con la intención de ir en busca del trío que había salido del hotel y que se había esforzado en dejarme fuera de este. Aunque bueno, gracias a eso había podido conocer la información que había salido en la televisión gracias al stand del viejo, y así  evitar un conflicto interno antes de que volviera Polnareff al grupo.

—¿___?— giré rápidamente la cabeza al reconocer la voz del pelirrojo tras de mí, deteniendo mis pasos de golpe—. ¿Ha donde vas con tanta prisa? No creo que alcance a Jotaro si es a él a quien estás buscando— dijo mientras apartaba la mirada, dándole un sorbo a la bebida que tenía.

—¿Eh? ¿Qué? Pero, juraría que...— suspiré mientras negaba. Quizás había cambiado de planes en el último momento, o que sospechaba algo—. No, no es eso. En realidad iba en tú búsqueda— sonreí tranquila.

—¿Uhm? ¿Para qué?— preguntó mientras ladeaba levemente la cabeza, alzando una ceja.

—Para ir de comprar, ¿para que más?— dije como si fuera algo bastante obvio, aun si había improvisado ese plan en el último momento.

—Pensaba que ya estabas satisfecha con todo lo que comprarte ayer.

—Y lo estoy, pero he conseguido esto de aquí. Y necesito gastar todo lo que tiene dentro— sonreí con malicia, mostrando la cartera que le había robado a Joseph antes de salir del cuarto.

Lo más seguro era que en el momento en el que volviera al hotel tras la pequeña excursión que iba a tener con el Noriaki iba a recibir la regañina de mi vida por haberme adueñado de una cartera ajena y gastarme su dinero.

Pero iba a valer la pena gastarme todo su efectivo.

—¿Entonces es para...?

—Vamos a ir a por suministros— aclaré mientras tomaba su mano con cierta brusquedad debido a lo impulsivo que habían sido mis movimientos, tirando de su cuerpo en dirección a la puerta—. Tras lo que pasó ayer Polnareff y ese tal... Davo. Por no olvidar todo lo del viaje en barco tan desastroso que hemos tenido, definitivamente me parece una muy buena idea comprar alguna que otra cosa emergencias como esas.

—¿Y eso es...?

—En principio un botiquín de primero auxilios. También algo de comida y agua, una linterna, un mechero, una mochila para cargar todo...— comencé a enumerar, deteniéndome en medio de la calle tras habernos alejado lo suficiente como para poder retractarnos y volver allí—. Entre otras cosas que tengo en mente— me giré hacia el pelirrojo, encarándolo con los brazos cruzados debajo del pecho—. ¿Sabes como moverte por esta ciudad?— negó—. Genial, yo tampoco.

—Volvamos al hotel y pidamos un mapa en...

—¡Oh, vamos!— alcé la voz mientras volvía a tomar su mano, cortando sus palabras—. Dejémonos de mapas y perdámonos juntos por la ciudad ahora que tenemos algo de paz, seguro que es divertido— reí levemente.

Sin más, comencé a correr tras volver a tomar su muñeca, tirando de su cuerpo sin darle tiempo a rebatir mis palabras. Recorriendo las calles de la gran ciudad a toda velocidad en busca de todos los suministros para emergencias (algo me decía que iba a pasar con mucha más frecuencia de lo que deseaba) que tenía en mente.