Capitulo 16

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Rose

Me acomodo un poco el final de mi vestido blanco y sonrío leve con algo de nerviosismo al verme al espejo, mi mejor amiga me aprueba poniendo sus pulgares arriba y es todo lo que necesito para pararme.

Me ayuda a montarme al coche rumbo a la iglesia y ella se pone hablar sobre sus ex novios, sabía que lo hacía para que no pensara en la locura que de algún modo iba a cometer.

Rose Díaz
Eso suena bien

Sonrío sin poder evitarlo jugando con mis manos ligeramente, el auto se detiene en un semáforo y miro a mi amiga tapando su boca con mis manos pero la aparto rápido cuando está me muerde.

-Porque carajos no eres una persona normal? - pregunto bajo mirándola desconcertada, ella solo se encoge de hombros y sonríe como si nada hubiera pasado.

-Tu me amas así - Dice simple y le alborotó el pelo - Hey, no arruines la mercancía - Me reclama esta vez ella y le sacó la lengua hasta que llegamos a la iglesia.

Me ayuda a bajar casi haciendo que cayera de un charco arruinando el vestido, pero no pasó así, entranos al lugar y ella me empieza a maquillar para después verme.

-No tienes miedo? - Pregunta bajo y me mira un tanto desconcertada - Es que, ahora vas a ser esposa Rose, hace poco tu bailabas todo el día y noche recibiendo piropos por todos los hombres , ahora estás vestida de blanco joder, sabes la responsabilidad que acarrea eso? Ahora tendrás que levantarte todos los días hacer desayuno para ese bicho que llamas "amor" y esa mierda que nunca haré yo, primero muerta antes de llamar a alguien así mirándolo de esa manera boba en que lo haces -Réplica Emma haciendo recalcar su estilo de vida, ya que hace poco se había molestado con Jayden aunque a pesar de todo sabía que terminarían juntos.

Solo asiento sin saber que decir algo nerviosa ante toda la situación, pasó una mano por mi vestido alisando una arruga inexistente para aliviar tensión que sentía.

Veo como la puerta se abre poco a poco revelando a Jayden el cual me mira y sonríe levemente.

-Ya todo está listo, Marcos te está esperando en el altar así que muévete antes que le de un colapso al pobre tipo, parece un saco sudado de papas -Dice como siempre dramatizando las cosas.

En eso el se da cuenta que está Emma en la habitación quedándose callado para observarla con esa admiración.

-Yo mejor los espero afuera.

Paso por su lado apretando leve su hombro antes de salir de la habitación, me mantengo delante de la puerta donde dentro estaba mi prometido, camino de un lado a otro hasta que sale un Jayden con el cabello alborotado y un chupon en el cuello.

-Nunca vas a cambiar.

Lo miro y le arreglo el cabello haciendo que me sonría - Después hablaremos sobre mi fracaso de mi vida amorosa, así que primero iremos contigo - Dice sosteniéndome del brazo ya que el sería el que llevara al altar - Estás lista? - pregunta bajo viéndome atenta y asiento ligeramente cuando las puertas se empiezan abrir viendo al final del camino viendo a mi prometido.

Sonrío leve al verlo y comienzo a caminar lentamente cuando inicia la música, poco a poco me acerco a él hasta que lo tengo de frente así tomando mi mano y besa mi mano acercándome un poco a el quedando frente a frente.

El cura empieza hablar sintiendo como si los segundos fueran horas, hasta que por fin terminamos los votos y llegan las promesas hasta sentir sus labios lentamente sobre los míos, así acariciando lentamente sus mejillas quedando completamente pegada a él, sonrío sobre sus labios cuando escucho los aplausos de las pocas personas que habían ahí.

Nos separamos leve para después ver a sus padres con una cara de pocos amigos, el me besa de nuevo y rio leve para después entrar con el al lugar de la iglesia donde me arregle. Sus manos recorren mi cuerpo hasta llegar al borde del vestido, este me lo sube hasta la cadera notando que no tenía bragas.

-Me quieres matar no? - Susurra en mi oído y muerde el lóbulo de este, se me sale un pequeño jadeo cuando acaricia mi intimidad, al estar húmeda después de sus toques adentra dos dedos en mi interior mientras sus labios atacan mi cuello.

Escucho cuando abre el zíper de su pantalón bajándolo junto a su bóxer, sintiendo así su punta en mi entrada, me penetra solo hasta la mitad así arrugando leve su smoking al no ver que se mueva muevo leve mis caderas hasta que me detiene poniendo sus manos en la cadera, subo mi vista para poder verlo y al ver que esta viendo a la salida me sonrojo leve ya que me imaginaba lo peor, con cuidado hago que el vestido cubra lo necesario de nuestros cuerpos para después escuchar la voz del cura.

-Lo siento por interrumpir - Dice algo avergonzado - Pero necesito que se vistan por favor y salgan de acá, esto es templo de Dios -Murmura para después salir del lugar, gimo alto hechando la cabeza hacia atrás cuando me comienza a embestir fuerte, rudo, sin piedad, su mano saca uno de mis pechos comenzando a jugar con el como si de una paleta se tratara, tapo mi boca.

-Necesito que... te corras - Dice Marcos con la voz grave y su respiración entrecortada moviéndose más rápido contra mi, hasta que siento mi intimidad contraerse al rededor de su miembro corriéndome sintiendo su líquido tibio dentro de mi, sale de mi aun chorreando un poco limpiándose y después a mi ayudándome a vestirme, cuando me paro bien hago una pequeña mueca por el ardor que siento entre mis piernas, el al verme así se ríe leve pero me carga así enredando mis piernas en el, nos vamos al carro saliendo de la fiesta sin decir nada y cuando nos montamos le decimos al chofer que nos lleve a casa.

-Estás mejor? - Pregunta bajo acariciando leve mi abdomen bajo y asiento ligeramente viéndolo atenta, llegamos en cuestión de minutos y al escuchar un pequeño llanto frunzo el ceño, me quito los tacones para empezar a buscar por los pasillos pero al revisar toda la casa no encuentro nada.

El llanto cesa y en eso siento como me abrazan por detrás y me volteo para ver a Marcos pero frunzo el ceño cuando bajo la mirada para ver a un bebé en sus brazos.

-Dile hola a nuestra pequeña - susurra viéndome para ver mi reacción y con cuidado cargo a la pequeña sintiendo algo de miedo por si llega a caer o algo.

Y así es como le di fin a todo mi pasado, al diario de una prostituta

Diario de una prostituta  (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora