I N E F A B L E (JJ Maybank)

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- Estábamos fuera, así.- JJ comenzó a contarnos lo que les había sucedido.- Saltaba pintura de la pared, desde dentro. Fijaos en esto.- se acercó al Pope, Ki y a mi, y comenzó a sacudirse el cabello.

- Es caspa, que asco.- dijo Kiara al ver pequeños fragmentos blancos salir de su pelo.

- Es pintura.- rectificó el rubio.- En ese momento yo ya estaba... esperando a la muerte.

Solté una pequeña risa al escuchar pero enseguida volví a ponerme serio al ver la mala mirada que me estaba dirigiendo.

- Visteis a los que nos dispararon, ¿no?- preguntó Pope.

- Si.

- ¿Podríais describirlos?- pregunté.- Algo con lo que poder ir a la policía.

- Corpulentos.- respondió JJ.

- ¿Corpulentos?

- Eso no ayuda.- dijo Kiara.

- A ver, escuchad como los tíos que se ven por el taller de mi padre.- JJ "específico".- Ya sabéis que hacia escondites para alijos de narcos.

- Si, si lo sabemos.

- Así que lo digo con total seguridad, esos tíos, esos matones.- le dio una calda a su cigarro.- Pasan droga.

- ¿Qué pasan droga en plan narcos?- preguntó Pope no muy seguro.- ¿Esos tíos pasan droga en plan Pablo Escobar?

- Si tío.- le quite el cigarro de entre los dedos a JJ y le di una calada.

- Chicos, esto no es una peli de mafiosos.

- ¿Y qué aspecto tiene concretamente esos narcos?- preguntó Pope.- Si es que vamos a sacarlo a la luz, porque por lo visto no sabéis que buscar.

- ¡Tío, no estuve haciendo fotos mentales todo el rato!- JJ exclamó alterado.- Estaba atacado, ¿te enteras?

Le di una calada larga al piti antes de que JJ me lo quitara de las manos y lo dirigiera a su boca.

- Puedo deciros por cómo gritaba la señora Lana, que esos tíos son muy, pero que muy chungos.- finalizó.- Así que la cosa es seria, no me gusta un pelo.- me hice a un lado para dejarle hueco en el sofá en el que estaba sentado.

- ¿Y para qué iban a querer la brújula?- pregunté.

- Es una chatarra, no podría empeñarse no por cinco pavos.- dijo Pope.- Sin ofender, se que es una reliquia de tu familia.

- El despacho.- hablo John B por primera vez en todo este tiempo.- El despacho de mi padre, siempre lo cerraba por miedo a que la competencia le robase su investigación sobre el Royal Merchant.- comenzamos a seguir al chico al interior de la casa.- Solíamos reírnos de él diciendo que no lo encontraría, pero ahora que lo está, esta tal cual lo dejo.- quito el candado de la puerta dándoles entrada libre a la habitación.

- Habré dormido aquí unas quinientas veces y jamás había visto esta puerta abierta.- Pope tenía razón, se habían reunido y quedado a dormir aquí más veces de las que se podían contar y aún así nunca habían visto la habitación abierta, Big John se aseguraba de ello.

- Aquí, mirad.- John B saco un corcho con varios papeles colgados en el.- Este era el dueño original.

- Robert Q. Routledge.- leyó Kiara.- De 1880 a 1920, y lleva la brújula de la suerte.- señalo la foto.

- De hecho, le dispararon después de comprarla.- dijo John B.- Y entonces le mandaron la brújula a Henry, Henry murió en un accidente de fumigación de cultivos. Cuando él murió la brújula pasó a Stephen, que llevaba la brújula encima cuando murió en Vietnam.- seguí cada uno de los movimientos que hacía John B sobre el corcho observando las fotos de sus familiares.