I N E F A B L E (JJ Maybank)

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- Chicos, he leído esto unas mil veces y no tiene ni pies ni cabeza.- dijo Kiara sosteniendo la carta que le habían enviado a Pope.- Los Limbrey son dueños de medio Charleston, ¿qué van a saber los reyes de los Kooks de Charleston sobre un asesinato en la isla de Kildare?

- ¿Y por qué a ti en concreto?- preguntó JJ.- Eso también da mal rollo.

- "Por favor, venga solo"- leí.- Eso es muy sospechoso.

- Lo mismo estaba yo pensando.- respondió Pope sin quitar la vista de la carretera.- Creo que es porque... ¡Venga, ya!- mucho humo comenzó a salir del coche nublándonos la vista.

- Para en la cuneta.- ordenó Kiara.- Es demasiado humo , incluso para la camioneta de tu padre.

- ¡Pope, qué tengo los pulmones sensibles!- se quejo JJ mientras tosía llevándose una mirada desconcertada de mi parte y de la de Ki.

- ¡Pope, frena!- exclamé al ver que el coche seguía en marcha.

- Voy, voy.- finalmente consiguió parar la furgo a un lado de la carretera.- ¡No! ¡No!

- ¡Va a explotar!- al escuchar a Ki empujé a JJ fuera del coche para poder salir cuanto antes.

- Anda ya va a explotar.- dijo Pope mientas abría el capó para ver que es lo que había causado todo este desastre.

- Seguro que has desenganchado el radiador, nunca había visto nada igual, ¡el tapa cubos a salido volando!- dijo JJ mientras aplaudía.- Más vale que aplaces tu reunión de esta tarde.

- ¡JJ!- le regañé colocando mi mano entre las suyas evitando que siguiese con los aplausos.

- ¿Plan B?- preguntó Ki.- Podríamos usar el transporte público, hacer autostop, alquilar bicis...

- Oye Pope, tranquilo.- dije sin causar ningún efecto en él.

- Sí, es el radiador.- confirmó JJ mirando el interior del coche.

- Mi padre me va a matar.

- Sí, es posible.

- Conseguiremos arreglarlo.- dije mirando mal a JJ.- Lo llevaremos a un mecánico por aquí, no puede ser muy caro, ¿verdad?

(...)

- Puedo darle prioridad, pero os costará un poco más.- nos informó el mecánico.

- Venga ya.- me queje.- Sabemos de sobra que es el radiador lo que está mal, no puedes pedirnos tanto por cambiar un puto radiador.

- Ya os he dicho lo que hay, si queréis bien, si no, ya sabéis dónde esta la puerta.- rodé los ojos ante la respuesta del hombre.- Tengo más trabajo.

Pope acabó aceptando y el mecánico volvió a explicarnos de nuevo todo lo que era necesario hacerle al coche, exteriormente parecía estar prestando atención, pero la verdad es que hasta está tarde no sabía ni que lo coches llevaban radiador.

Me aleje de ellos cuando se fueron a hablar del presupuesto, fui hasta JJ y Kiara, la cual se fue al verme llegar para ir a ayudar a Pope con el pago.

- ¿Estabas entendiendo algo o solo te hacías el interesante?- me preguntó JJ burlón al verme.

- Estaba intentando que ese timador no le sacase todo el dinero a Kiara, sus padres van a matarla.

- Van a hacerlo de todas formas.- dijo mientras levantaba los hombros.- No son tan guay como tu padre, mi suegro.

- La verdad es que tú suegro si que es bastante guay.- reí colocándome en el espacio que había entre sus piernas.- ¿Qué hay del mío?

- Ahí está, como siempre.- respondió no muy seguro.

- JJ, me preocupo por ti, no sabes lo mucho que me duele saber que no estás a salvo en tu propia casa.- acaricié su abdomen recordando los horribles golpes que vi en él el día que compro aquel jacuzzi.

- Mi casa no es esa casucha.- tomo mi mano y la colocó sobre mi propio pecho.- Mi casa es el Chateau, los Pogues, tú...

- JJ...- sonreí.- Algún día pienso darte un lugar al que acudir y al que llamar hogar, lo prometo.

- Gracias, Eros.- dejo un beso en el dorso de mi mano.

- ¡Chicos!- Pope y Kiara se acercaron hacía nosotros.- Ya está, ahora solo hay que esperar a que lo arregle, no debería tardar mucho.

- ¿Cuánto ha sido?- preguntó JJ.

- 370.- murmuró Pope.

- ¡370!- exclamé dejando caer el filtro que me había colocado en los labios mientras me liaba un cigarro.- Con eso se puede alimentar a toda mi familia por dos semanas.

- No importa, lo he pagado yo.- dijo Ki.- Bueno, lo han pagado mis padres.- se corrigió así misma bastante feliz por la idea de que sus padres tuviesen que pagar casi cuatrocientos dólares.

JJ acercó la llama de su mechero a mi boca y con un leve movimiento encendí el piti que me había preparado.

Estuvimos esperando mientras hablábamos de temas triviales y sin importancia, Pope seguía preocupado por la bronca que le esperaba al llegar a casa y Kiara tampoco parecía muy animada, con la mirada le pregunte a JJ si sabía que era lo que le pasaba, pero solo me respondió negando con la cabeza, lo que quería decir, que lo sabía pero no debía preocuparme.

Algunas horas después la furgo de Pope estaba lista, el moreno condujo hasta una zona vacía en la que pudiésemos pasar la noche. Todos nos acomodamos en la parte trasera de la furgoneta, que era lo suficientemente grande como para que los cuatro pudiésemos tumbarnos a descansar.

A mi derecha estaba JJ, que estaba boca arriba con su gorra sobre su rostro para que nada le molestase. Algo más lejos de nosotros estaban Pope y Kiara uno tumbado al lado del otro. Sonreí al ver como Kiara se levantaba para dejar un beso en la mejilla en la mejilla de Pope y luego se tumbo a su lado.

- No sé si a John B le va a gustar eso.- murmuró JJ asustándome.

- ¿Por qué?- pregunte confuso.

- Ya sabes, "nada de líos entre Pogues"- dijo haciendo comillas con sus dedos.- Pope y Kiara se han saltado la regla principal.

- ¿Solo Pope y Kiara?-pregunté alzando la ceja.- Quizás lo que esos dos es lo que menos le sorprenda.

- Lo nuestro no es un lío.- me tomo por la cintura y me acercó aún más a él. Me observó durante unos instantes mientras peinaba mi pelo fuera de mi cara.- Porque estamos profundamente enamorados el uno del otro.

- Eso dilo por ti.- me separó de él con el ceño fruncido.- Es broma, tonto.- lo tome de las mejillas para dejar un suave beso sobre sus labios. Me acosté sobre el muy incómodo suelo de la parte trasera de la furgo manteniendo mi espalda pegada al pecho de JJ, que paso su brazo por mi cintura apoyando su mano sobre mi pecho.

- Buenas noches, Eros.- dejo un beso en mi cabeza.

- Buenas noches, JJ.- me acomodé entre sus brazos sintiendo tocar el suelo incluso si estaba durmiendo sobre un coche incómodo.