capitulo 12

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Contando los días.

16 días...

Para....

Mi cumpleaños.

Ufff pasaron, varias cosas en ese entonces.

Por ejemplo: tuve una cita con joe encontrándose mi hermano a nuestro lado.

Sander se comenzó alejar de mi.

Cosa que no le preste atención, ya saben para no ser problemática y dramática como la mayoría de las personas me tomaban.

Aunque eso me comenzó hacer sentir mal, no me quería alejar de el. Ósea lo quería.

Pero dicen que, cuando alguien no es para ti lo mejor es dejarlo ir.

Pero ¿Como lo dejaba ir?

¿Si lo que sentía era más fuerte que yo?

No podía hacer que el me quisiera como yo lo quería, no, no podía. Si las personas pudiéramos hacer que otros sientan lo mismo que nosotros sentimos por ellos,  creo que probablemente fuera un completo  desastre.

Porque, cuando haces algo contra la voluntad de alguien más, no lo estas dejando que elija lo que quiere, si no lo que tu quieres ¿Y en donde queda la felicidad del otro? Porque no es felicidad estar con alguien que no quieres.

Mi cerebro pasaba todo tipo de crisis mentales, ya no dormía, ya no podía concentrarme bien en lo que hacía, y me la pasaba comiendo basura todo el tiempo.

estaba mal. Todos los días, las chicas siempre iban a ver como estaba, les decía que estaba enferma.

Porque era cierto lo estaba.

Hasta que un día de esos me levanté de mi cama y decidí por mi, que  no dejaria que la lejanía de sander me afectará.

«16 para mi cumpleaños».

Me Di una ducha, lave mi cabello y lo arregle, me puse un vestido blanco algo suelto.

Y decidí ir para que los chicos, de todas maneras dylan vivía ahí y el también era mi amigo.

El era un verdadero amigo, todos los días me escribía para ver como estaba, y era muy agradable que lo hiciera.

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Sander

—san lo mejor es que te calmes —me aconsejo  mi tío wil pero era absurdo hacerlo.

Ya en ese  momento quería partirle su madre a quien se acercara.

Mis ojos ardían, mis mejillas se enrojecian por la sangre que pasaba por ellas.

«maldición»

«¿Porque?»

«¿Por que a él?»

—¡¿Como quieres que me calme, si el que está allá dentro  por algo que no hizo es mi padre?!— cuestione, era una basura por permitir que le estuviera pasando eso a mi padre.

—sander, yo se que no es culpable porque yo le creo, pero no puedes estar culpandote por eso —mi tío estaba haciendo el intento de calmarme pero las cosas no eran tan fáciles conmigo.

—¡Hay que hacer algo!—exaspere —¡Joder tío es mi padre!—No quería imaginar las cosas que le podían estar haciendo en el lugar donde se encontraba.

—hijo, por favor no te pongas así, verás que saldrá pronto —siguio tratando de calmarme.

—¡Es mi culpa!—confesé—si no lo fuera dejado sólo ese día nada de esto fuera pasado.

El clichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora