Capítulo 15

104 7 1
                                    

Sentía que las cosas no estaban mejor que antes y la confirmación llegó en el momento que finalmente abrió los ojos. Le tomó varios segundos aclarar su vista y que el mareo en su cabeza se desvaneciera. Dio un vistazo a su alrededor, encontrándose en una habitación común de quizás algún hotel... o una casa, aunque si era una casa a lo mejor estaba en el segundo piso, podía ver las hojas de él árbol afuera moviéndose.

Frunció el ceño. ¿En casa de quién se encontraba? Su mente estaba algo confusa.

—Veo que despertaste —la voz proveniente a sus espaldas le hizo tensarse. Volteó rápidamente para encontrarse con ese hombre que le hizo volver las memorias de lo sucedido hace un rato de golpe, casi de inmediato comenzó a sentir sus manos sudar. Simon se recargó en el marco de la puerta.

—¿Por qué estoy aquí? ¿Qué me vas a hacer?
... ¿qué me hiciste? —abrió mucho los ojos, queriendo levantarse de la cama, solo para que un mareo lo golpeara por la rapidez y lo hiciera sentarse de vuelta.

—No te hice nada —Louis pasó saliva, mirándolo dudoso, aún cuando rodó los ojos— ¿Qué te hace pensar que alguien como yo podría dañarte, Louis? —su rostro se pintó de una falsa mueca inocente, lo que le hizo querer replicarse por aquella ocasión, solo que antes de que pudiera hacerlo; el hombre ya aclaraba su garganta de nuevo— Te traje aquí para asegurarme de que te ha quedado claro todo lo que estipula el contrato de Harry, no quiero ninguna sorpresa extra.

—No somos...

—Ya escuché esa historia dos veces y con todo lo que te mostré, creí que lo había dejado claro —se acercó más al castaño, provocando que este lo mirara sin perder detalle: como prevención—. Mira, podemos hacer esto por el camino fácil o complicado, tú decides.

—Nada de esto estaba en el contrato, me secuestraste —señaló su posición— y me estás vigilando, amenazando y haciéndome firmar con más personas. Puedo demandarte por eso.

—¿De verdad podrías? —sonrió, sentándose a un lado de él en la cama, Louis tomó más distancia— ¿De verdad le harías eso a Harry, Louis?

Eso fue como un tope grande, uno que le hizo frenar todo lo que estaba planeando en contra de Simon si era necesario protegerse... estaba ahí por Harry.

—Puedes demandarme, claro pero, ¿cómo lo harías? Pruebas no tienes de absolutamente nada.

—Pero el empleado que —cerró la boca cuando el más viejo enarcó una ceja.

—Ninguno de mis empleados dirá una sola palabra, si pude comprar un silencio muy especial ¿qué te hace creer que no podría hacerlo con uno simple? —el menor apretó las manos, sintiendo el enojo acumularse conforme las palabras en burla salían hacia lo que pensaba hacer— y bueno, si me denuncias ¿qué será de tu querido Harry? —Simon tomó su rostro con una mano y apretó cuando intentó liberarse.

—Suéltame, a él no puedes hacerle nada, ahí te hundirías —jadeó al sentir agarre comenzar a lastimarle, llevó sus manos a ese brazo para intentar quitarlo— suéltame —repitió.

—Físicamente no, querido Louis. Pero, ¿qué tal con sus preciadas canciones? Le tomó años escribirlas —lo acercó más a él. Louis sentía los nervios en la punta de la garganta, pero aún así le sostuvo la mirada— ¿harías que las perdiera solo por mi? Eso sería muy egoísta de tu parte, más porque lo que son y por ser él quien te sacó de la miseria donde estabas.

—¿Qué es lo que quieres? —preguntó bajito, temiendo que algo más pasara. Simon hizo la señal de dos con los dedos, haciendo que su estómago se hundiera ante el mal presagio.

—Estarás cinco años en mi compañía, atendiendo a todos los artistas que yo te indique y sirviéndome a mi, especialmente —pasó uno de sus dedos por el suave pómulo bronceado del menor— a cambio de eso; te dejaré tener lo que quieras con Harry a puerta cerrada y fuera de ella tendrá una novia. Le entregaré una por una sus canciones en el resto del año y mantendré mis manos fuera de tu madre o hermana.

◤℘ Dos Corazones: Un Hogar◢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora