Capítulo 1: El Expreso.

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____ Malfoy:

Hoy era 1 de Septiembre, eso significaba que sería mí primer día en Hogwarts. Una escuela a la cual asisten jóvenes magos para desarrollar sus habilidades mágicas y en la cual fui aceptada junto con mí hermano, Draco.

-Draco, despierta, se hace tarde-dije golpeando la puerta de la habitación de mí hermano.

-¡Ya voy, ya voy!-gritó con una leve molestia.

La verdad que no me llevaba bien con mí hermano, el siempre me molesta y tampoco me gusta que al igual que mí padre tengan siempre presente la pureza de sangre.

-¡HIJA, VEN AQUÍ!-gritó mí padre, Lucius.

-Dime, Lucius-digo llegando al comedor conde él estaba

-¿Ya estás lista?, No quiero llegar tarde por tu culpa-dijo con tono amargo.

-Sí, sólo falta Draco.

Seguramente esté acomodándose el pelo de Barbie.

Después de esperar a Barbie...digo, Draco fuimos andén 9¾ de la estación King's Cross. El Expreso va a llevarnos, a los estudiantes, hacia el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.
El tren salía de la plataforma 9¾, sin falta, cada 1 de septiembre a las 11 de la mañana y llega a la estación de Hogsmeade a primera hora de la tarde. Genial, ¿no?.

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Estaba sentada sola, en uno de los vagones del tren. Hasta que llegan dos chicos y... ¡Por Dios!, ¿ES HARRY POTTER?.

-Hola...¿nos podemos sentar?-dice un pelirrojo. Creo que es un Weasley.

-Sí, claro...y... ¿Ustedes son?-dije, que pregunta más ridícula ___.
Probablemente tengas al frente a "El Niño Que Sobrevivió tras sobrevivir al primer ataque de Lord Voldemort".

-Yo soy Harry Potter-dijo el chico azabache. Tenía razón.

-Y yo soy Ronald Weasley, pero dime Ron.- dijo el pelirrojo. Otra vez tenía razón.-...¿Y tú eres?

-Oh, claro, un gusto chicos, soy ___ Malfoy-digo, obviamente me esperaba que me miran mal sólo por mí apellido y todo eso.

-¿U-una Malfoy?-dice Ron algo asustado.

-Sí, pero no se preocupen, no soy como mí familia.

Ron y Harry se miraron un poco confundido por ello.

-Vaya, pues si es así, me caes bien-dijo el pelirrojo sonriéndome, a lo que yo también hice y Harry se sumó.

En eso llega una señora con el carrito de dulces ofreciéndolos.

-¿Quieren algo?-dijo con una cálida sonrisa.

-Sí, dame todo por favor-digo yo entregándole los galeones que valía todo el carrito de dulces.

-Wow ____, ¿vas a comerte todo eso?-dijo Ron y Harry sólo que quedó mirándome algo sorprendido.

-Claro que no chicos, es para los tres, agarren lo que quieran-digo agarrando unas grageas.

-Gracias ____-dijeron los chicos mientras agarraban algunos dulces.

-¿Grageas de todos los sabores?-dijo Harry.

-Todos los sabores del mundo-afirmé yo mientras comía una galleta de vainilla. Mis favoritas.

-George dice que comió una de moco- dijo Ron y Harry sacó la gragea que estaba por comer lentamente de su boca mientras lo miraba algo asqueado.

-Rana de chocolate... ¿es de verdad?-preguntó el azabache.

-Es un hechizo simple. Además la tarjeta es lo que vale, cada paquete tiene una bruja o mago famoso, yo tengo unas quinientas- respondió Ron.

Harry abrió el paquete y la rana de chocolate saltó hacía la ventana.

-¡Cuidado!- dijo el pelirrojo al ver qué la rana salió por la parte de la ventana que estaba abierta.- oh, mala suerte, sólo pueden saltar una vez.

El azabache luego miró la carta que le había tocado.

-¡Es Dumbledore!- dijimos Ron y yo- tengo más de seis- continúo el pelirrojo.

Harry miró de nuevo la carta, pero se dió cuenta que Dumbledore ya no estaba.

-¿No creerás que se va a pasar ahí todo el día?...¿O sí?- dije.

En un momento veo a una rata sobre el regazo de Ron hurgando la caja de grageas.

-Oh, él es Scabbers. ¿Patético, no creen?- dijo Ron.

-Un poco- contesté con Harry.

-Fred me enseñó como hacerlo amarillo, ¿les enseño?- preguntó Ron.

-¡Sí!- contestamos.

Ron sacó su varita y aclaró su garganta.

-Mhm, Ra-- pero al empezar llegó una chica la cuál apoyó las manos en los marcos de la puerta del vagón.

-Ay...- suspiró- ¿han visto una rana?, La perdió un niño llamado Neville.

-¿No?- dijo con una ceja levantada y clara confunción Ron.

Ví a la niña y era muy hermosa. Me gustaba su cabello.

-Oh... estás haciendo magia-dijo la chica viendo a Weasley con su varita en mano.- continúa-dijo e hizo una cara un poco de ¿superioridad?.

Ron nuevamente aclaró su garganta y comenzó a decir el hechizo:

-Rayo de sol dorado, color de la mantequilla, convertid esta rata en amarilla-Weasley movió su varita pero sólo logró que la caja se moviera.

Nos vió a mí y a Harry con algo de decepción y Harry sólo hizo una mueca, mientras yo le daba una media sonrisa.

-¿Seguro que es un hechizo de verdad?-dijo la chica mientras rió- Bueno no funciona, ¿o sí?, claro que yo sólo he probado hechizos sencillos, pero han funcionado bien.-sacó su varita y entró al vagón dirigiéndose hacía Harry mientras se sentaba a mí lado, quedando frente a él apuntándole con la varita- por ejemplo, Oculus Reparo- dijo haciendo que los lentes del azabache se arreglaran.
Ron mientras comía chocolate vió lo que hizo y quedó algo boquiabierto, giró en dirección hacía mí que me encontraba cómo él.

-Así está mejor, ¿no?- sonrió la chica con grandes dientes- ¡CARACOLES HERVIDOS, ERES HARRY POTTER!- dijo sorprendida- soy Hermione Granger, y... ¿ustedes dos?- nos señaló junto con Ron.

-Ammm... Ron Weasley.

-Un placer.- Dijo Granger pero no con muy buena cara y luego me miró a mí.
Pude apreciar sus ojos de un color muy lindos, castaños.

-Yo soy ____ Malfoy- digo sabiendo que me miraría algo extrañada o con disgusto.

-¿Malfoy?, Seguramente no te gustará juntarte con los que no sean de sangre pura-dijo Granger con leve molestia a lo que negué.

Iba a hablar pero Ron interrumpió.

-No Hermione, ____ no es como su familia, a ella no le importa la sangre dijo con su típica sonrisa ladeada.

Granger me miró por unos segundo y me sonrió con sus grandes dientes a lo que yo también le dí una media sonrisa.

-Tienen que cambiarse ya, pronto llegaremos a la estación.- dijo Hermione levantándose y casi saliendo del vagón, pero antes dijo- tienes tierra en la naríz, por cierto, quítatela, ahí- le dijo a Ron mientras se señalaba el costado de la naríz y se iba.

Los tres nos quedamos algo confundidos hasta que hablé.

-Que carácter- dije largando una risita contagiando a mis nuevos amigos.



Olvídate De La Sangre-(Hermione Granger y tú G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora