Itachi Shinden: Komyo-hen

Capítulo 1 (parte II)

La Gran Guerra que involucró a shinobis de continentes enteros terminó después de varias semanas luego del día en el que Itachi se dio cuenta del significado de su propia existencia. Esta guerra, que más tarde se llamaría "Tercera Guerra Mundial Shinobi", llegó a su fin gracias a la conclusión de un tratado de armisticio entre la Aldea Oculta entre las Hojas y la Aldea Oculta entre las Rocas, que fueron los principales estados en guerra.

Konoha estaba tomando la delantera en la situación de la guerra, pero de acuerdo con el apaciguamiento político debido a Hiruzen, el Tercer Hokage, habían cesado las hostilidades. Logrado por medio de la condición excepcional de no exigir en absoluto compensaciones de Iwagakure.

La gente de la facción pro-guerra contra la decisión de Hiruzen, quien había sido visto como "débil" para mantener el descontento de la aldea, decidió renunciar como el Tercer Hokage.
Como resultado, un nuevo Hokage tuvo que ser elegido y Namikaze Minato, que había sido etiquetado como Héroe de la Gran Guerra, tomó el puesto del Cuarto.

Debido a la renuncia de Hiruzen, poco a poco el pueblo estaba a punto de recuperarse de los trastornos de la guerra.

Hasta entonces, Itachi tenía un objetivo preciso.

«Al convertirme en un shinobi mejor que nadie, me desharé de los conflictos de este mundo».

Para un adulto, habría parecido un sueño exagerado con el que se podría reír. Pero para un Itachi de de cuatro años, este sueño fue lo más valioso que superó todo descanso.

Sería aceptado como un ninja oficial después de estudiar el ninjutsu básico en la Academia y tomar el examen por primera vez en que había sido admitido.

Pero él, que todavía tenía cuatro años, no tenía suficientes requisitos para asistir a la Academia.

Itachi quería convertirse en un shinobi lo antes posible.

Por eso entrenó solo.

—Estoy en casa.—Silenciosamente, tomó sus zapatos de la entrada y lentamente caminó por el pasillo.

—Bienvenido.

Cuando pasó frente a la cocina, su madre Mikoto lo saludó. Ahora, una nueva vida estaba viviendo dentro del útero de ella.

Un hermano menor o una hermana menor...

De cualquier manera, fue el primer hermano de Itachi.

—¿Hoy entrenaste también?

—Sí.

A la respuesta de su hijo, que parecía más un adulto que un niño de cuatro años, Mikoto se encogió de hombros cuando volteó sosteniendo su pesado vientre.

—¿Está papá en su habitación?

—Así es, pero ahora está ocupado, pequeño...

Mientras escuchaba las palabras de su madre, él caminó hacia la habitación de su padre.

En su entrenamiento de hoy había tenido problemas sobre cómo agarrar un kunai, por lo que quería preguntarle inmediatamente.

—¡¿Por qué el Cuarto es ese tal Minato?!—Sonó una voz enfurecida que Itachi escuchó desde el otro lado de la puerta, entonces se detuvo.

—Nunca sabes quién está escuchando, baja tu voz, Yashiro.—Ordenó su padre.

—Sin embargo, no lo entiendo. Cuando fueron seleccionados para la Cuarta Elección, no fue Orochimaru-sama el único nombre que aparece además de Minato? ¿Por qué nadie nominó el nombre de Fugaku-sama?—Respondió el hombre llamado Yashiro a su padre.

Dentro de su cabeza, Itachi recordó el rostro del hombre llamado Yashiro. Un hombre con ojos estrechos, de pelo gris y corto. Aunque era más viejo que su padre, él trabajaba como su subordinado.

—Yashiro-san tiene razón. Yo tampoco lo entiendo.—Habló un tal Inabi.

—Inabi.—Llamó Fugaku.

Uchiha Inabi fue uno de los mejores shinobi de la Fuerza de Policía Militar de Konoha. Él tenía un característico largo cabello negro. Era uno de los subordinados del padre de Itachi también.

—Cuando hablabas de "Fugaku de los ojos malvados" durante la Gran Guerra, los shinobis de los otros países temblaban de miedo.

—Comandante de la Fuerza Policial Militar de Konoha.—Corrigió.—Mi nombre es ese para el pueblo.

—Te digo que esa es una estrategia de los superiores.—Dijo Yashiro alzando la voz otra vez y continuó.—Los superiores, que no quieren que el clan Uchiha suba al escenario principal, no querrán anunciar oficialmente el papel prominente de Fugaku-sama durante la Gran Guerra a la aldea.
Por esta razón, personas como Minato y el Sannin, incluso Hatake Kakashi, que tiene el sharingan a pesar de que él no no pertenece al clan, se puso de pie al final. Si es verdad que Minato y Kakashi son tan bueno, entonces Fugaku-sama también lo es.

—Basta, déjalo.—Al comando de Fugaku, Yashiro vaciló.—... Mi hijo está escuchando.

El cuerpo de Itachi tuvo un pequeño estremecimiento en su lugar.

—¿Es Itachi?

Él había sido percibido...

No tenía experiencia.

Itachi apretó los dientes.

A regañadientes, él abrió lentamente la puerta.

En el interior, había cuatro personas.

Su padre Fugaku, y Yashiro con Inabi. Y otra persona, un hombre que tenía un pequeño punto en su frente. Ese hombre era un subordinado de su padre también, su nombre era Uchiha Tekka.

—¿Qué quieres?—Interrogó su padre.

—Hay algo que quiero preguntarte sobre el jutsu del shuriken.

—Estoy ocupado ahora, hazlo más tarde.

—Entendido.—Mientras hablaba, Itachi cerró la puerta rápidamente.

En el momento en que él salió, una luz roja profunda cubrió los ojos de los cuatro hombres.

El sharingan.
El kekkei genkai heredado entre el clan Uchiha.

Mientras regresaba a su propia habitación, Itachi recordó la atmósfera que envolvía la habitación de su padre. Entonces, por alguna razón, el campo de batalla que vio junto a él volvió a su memoria.

La imagen del infierno que estaba llena de malicia y mala voluntad...

La presencia, con la que todos en esa habitación estaban envueltos, era idéntica a la del ambiente ominoso que sintió allí.

—¿Qué está pasando, papá?—Preguntó... Pero no había nadie junto a él para responder a su voz murmurante.