𝐌𝐚𝐫𝐢𝐩𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐞𝐬𝐭𝐨́𝐦𝐚𝐠𝐨 [𝐴𝑙𝑢𝑐𝑎𝑟𝑑 𝑥 𝑅𝑒𝑎𝑑𝑒𝑟]

𝐃𝐞𝐜𝐥𝐚𝐫𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧

¿Hombres zorros en Londres? ¿Por que había gente del templo de cristal atacando a Londres y a Alucard? Necesitaba miles de explicaciones ante eso...Así que cite al emperador Kyoko Kitzune para hablar con el, ya que eran los únicos hombres tipo zorro que conocía.
Uno de mis guardias entró a mi oficina para decirme que el emperador estaba aquí esperando mi autorización para entrar, asistí con la cabeza, mi guardia salió de por la puerta y así... Era como estábamos frente a frente aquel hombre y yo...
¿Por que no estaba contenta?

Por mucho tiempo mi familia tenía conflictos con ellos, la única forma de hacer las pases era que Kyoko y yo nos casáramos... Mi padre y su padre estaban dispuestos a juntar templos, pero a mi no me agradaba el tipo, por mucho tiempo estuvo pretendiéndome, pero siempre lo rechazaba aparte sabía que era un mujeriego y era puro interés lo que quería...

-Kyoko: Hana...Mi rosa espinada-se inclinó-. Es un honor volver a verte mi amada...

-Toma asiento Kyoko, necesitamos hablar-dije sería-.

-Kyoko: por favor tome esta rosa que traje por usted-sonrió-.

Tome aquella rosa y la puse sobre el escritorio viéndolo con algo de desprecio...

-Kyoko: mi amada...

-¿Que hacia tu gente atacando Londres?-interrumpí-.

-Kyoko: ¿Y como sabe eso?

-Me llegó un informe de un soldado tuyo atacando a la gente de Londres... Y atacaron a soldados de mi segundo hogar.

-Kyoko: No tenía idea que Londres era tu hogar...Tampoco sabía que tenía ya un hombre en tu corazón-dijo serio-.

-¿Ese es tu motivo por la cual los atacaste?, Que patético eres...

-Kyoko: si no es conmigo, no será con nadie-golpeo la mesa-. ¡Tu me perteneces y a nadie más!...

Kyoko se acercaba a mi molesto, sentía su furia, mantuve mi postura firme en el asiento donde estaba, pero alerta por si me atacaba... Sombras empezaron a rodearme, estas tenían un aura roja...
Un disparo perforo su pecho tirándolo al suelo, provocando que esté gritará del dolor... Mi amado apareció tras mio, el fue el que había atacado al emperador, unas manos de oscuridad tomaron a este del cuello para levantarlo hacia nosotros...

-Kyoko: ¿Como permites que este tipo me ataque?

-Alucard: un poco más de respeto-rio-.