[ 8 ]

4.5K 518 116
                                    

Cuando llegó el cumpleaños de Kageyama su relación con Hinata iba de maravilla.

Sí, se besaban más seguido. También habían estado a punto de llegar a unos posibles roces en ciertas zonas íntimas, llegando a verse interrumpidos porque fueron tan idiotas para intentarlo en la sala del club y, por supuesto, a Tanaka se le olvidó su chaqueta deportiva (como casi todos los días) viéndose obligado a devolverse para tenerla de vuelta.

La escena que se encontró cuando entró fue interesante.

Ambos jóvenes estaban separados como a un metro de distancia, con sus mejillas sonrojadas, las Feromonas de ambos llenando el ambiente y fingiendo muy mal que acomodaban cualquier cosa para pasar desapercibidos. Claramente no sabían disimular, su senpai notó demasiado rápido la tensión que había en el ambiente y se dedicó a recuperar su objeto olvidado.

Eh allí arruinado su primer intento de intimidad.

Tal vez Tobio era muy lento y por eso no notaba la verdadera razón por la cual Hinata se la pasaba más pegado a él últimamente, casi alterado cuando el alfa se distanciaba por mucho tiempo y aunque Shoyo no lo dijera en voz alta parecía más ansioso por tener el aroma del azabache inundando sus sentidos.

Por ende, unos días antes de su cumpleaños a Kageyama le extrañó que la mitad de su ropa había desaparecido.

En serio, no estaba en su closet.

— Mamá — llamó el azabache, totalmente desorientado y con la confusión adueñada de su ser —, ¿la mitad de mi ropa por casualidad se encuentra sucia?

La mujer actuó sospechosamente sorprendida, comenzando a llenarlo de preguntas sobre cómo demonios era tan irresponsable para perder algo tan importante como la ropa en su propia casa.

" Creo que deberías hablar con tu omega, ¿no ha estado algo desconectado hoy?"

" Oye, inepto, podrías ir a visitar a tu omega y ver que tal está.."

Ajá, esa extraña voz de su cabeza también parecía inquieta por ver a Hinata.

En definitiva, eso sólo lograba confundir más a Kageyama.

Shoyo actuando raro desde días antes, su ropa desapareciendo, su madre sin tener idea de nada y esa voz molesta alterada por no estar cerca del omega.

— Tal vez sí pueda ir a visitar a Hinata.. — Murmuró Tobio pensativo. Inmediatamente su progenitora negó con la cabeza.

— ¿No lo viste ayer, Tobio? — Cuestionó ella, con los brazos cruzados y una ceja alzada — quizás esté ocupado y por eso no ha hablado mucho contigo hoy. ¿Por qué más bien no me ayudas a iniciar con los preparativos previos de tu cumpleaños?

— Falta una semana.

— Por algo se le llaman preparativos previos, cariño.

Eso no tenía nada de sentido.

Aún así prefirió no discutir con su madre y lo ilógica que era la situación.

Con el pasar de los días recibió pocos mensajes de Hinata, le informaba que estaba bien, le preguntaba cómo estaba y luego volvía a desaparecer por horas. Incluso pasó todo un día entero sin dar señales de vida y, aunque el alfa podía entender perfectamente que todos tenían una vida, Shoyo siempre le avisaba si estaría ocupado.

Para colmo, la voz de su cabeza se hizo aún más insoportable. No dejaba de repetirle que tenía que estar con su omega.

No era cómo si algo dentro del azabache tampoco le indicara o se sintiera algo molesto por no ver a Hinata esos días, parecía incómodo, pero por supuesto el alfa no terminaba de comprender con exactitud la razón por la cual pasaba todo eso.

Sin embargo, todo pareció cobrar sentido un día antes de su cumpleaños.

Porque un alegre pelinaranja parecía hablar con su madre mientras le entregaba una bolsa con...

¡¿Con su ropa desaparecida?!

" Te lo quise dar a entender, posiblemente si me hubieras hecho caso te habrías dado cuenta de la razón por la cuál tu omega actuaba tan pegado a ti."

No pudo evitar fruncir el ceño y apresurarse a llegar a la entrada de su casa (ahora entendía por que su madre lo hizo salir de la casa misteriosamente), alertando a los dos individuos que dejaron de charlar para mirarlo con nervios y sintiéndose descubiertos.

— Hinata — Saludó el más alto sin abandonar su expresión —, que sorpresa verte aquí.

El omega tragó grueso y forzó una diminuta sonrisa.

— Vine a planear algo con tu madre para mañana, es tu cumpleaños — Mintió, intentado esconder la bolsa detrás de su espalda —. Aunque ya no será sorpresa, que tristeza.. — Suspiró — Bueno, yo ya me iba así que..

— ¿Y te volverás a llevar mi ropa para tu nido?

Claro, ya lo había entendido todo.

Su ropa desaparecida, su madre con esa extraña actitud, Hinata prácticamente incomunicado..

Y su alfa interno desesperado y ansioso por estar cerca del pelinaranja estos días.

Todo era porque su omega había estado en celo.

°

¦ Holaaa, ¿cómo están? ¿Qué tal les pareció el capítulo? Ya vimos que Hinata se lleva bien con su suegra y Kageyama ni enterado xd. ¦

¦ Bueno, ya se reveló que las "voces misteriosas" que viven en las cabezas de nuestros protagonistas son nada más y nada menos que su Alfa interno (en el caso de Kageyama) y su omega interno (en el caso de Hinata). Aunque era algo obvio según el paso de los capítulos, ya me hacía un poco de felicidad terminar de revelarlo. ¦

¦ ¡Feliz cumpleaños atrasado a nuestro querido Kageyama Tobio <3. ¦

¦ Se viene triple actualización, debido a que llevo tres lunes sin actualizar (si mal no recuerdo xd). Así que estén atentos porque los siguientes capítulos estarán intensos.. Sí, en uno de esos capítulos tendremos Lemon * inserta música para la ocasión *. ¦

Nos vemos en el próximo capítulo. Con muchísimo cariño: Lizie. Les mando un beso y un abrazo virtual <3

Dear Hinata (Kagehina - Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora